Loro Parque ha celebrado el nacimiento de cinco crías de pastinacas o chuchos (Dasyatis americana), un hito muy importante para el programa de cría de esta especie, ya que el éxito de reproducción indica el bienestar del que disfrutan estos animales pertenecientes a la familia de los tiburones en las instalaciones del acuario del parque, con más de 1,2 millones de litros de agua de mar procedente directamente del Océano Atlántico.

Con estas cinco crías Loro Parque posee ahora un grupo de 16 pastinacas, siete de ellos machos y nueve hembras que conviven en la exhibición dedicada al ecosistema caribeño, sitio donde habitan estos animales tropicales y subtropicales, conjuntamente con peces Caballo (Selene vómer), Anisotremos (Anisotremus virginicus), Lábrido Español (Bodianus rufus) y Sargento mayor (Abudefduf saxatilis).

Las pastinacas o chuchos tienen un cuerpo plano con forma de diamante y suelen permanecer varias horas enterradas en los fondos arenosos. Su período de gestación alcanza los 5 meses y se destacan también por poseer un dardo venenoso en la lengüeta de su cola para defenderse de los depredadores, aunque "son dóciles si se les trata bien y se les alimenta a mano, algo que les gusta especialmente en Loro Parque ya que cogen un feeling muy bueno con los cuidadores", señala el conservador del Peces, Xoán Domínguez.

Entre los alimentos preferidos de las pastinacas se encuentran los moluscos en grandes cantidades, mejillones, almejas, navajas, y también pescado azul, calamares y gambas, "un variado y rico menú que garantiza el crecimiento saludable y paulatino de estas pequeñas crías", puntualizó.

En Europa hay cerca de 60 pastinacas en zoológicos, de los cuales, sólo tres de ellos han conseguido reproducir esta especie en cautividad y se estima que alrededor de 70 millones de tiburones mueren cada año en la naturaleza, debido a actividades humanas como sobrepesca y contaminación.