Ludotecas, cuentacuentos, juegos recreativos en azoteas, talleres, payasos o representaciones teatrales no solo sirven de entretenimiento, sino que se han convertido en elementos clave para la recuperación sanitaria de los niños obligados a permanecer durante largas estancias en los hospitales.

Hospitales, fundaciones y organizaciones no gubernamentales tratan así de que la hospitalización de un niño no afecte a su estado de ánimo ni a su felicidad.

Artistas, deportistas y rostros conocidos contribuyen a alegrar a esos niños, aunque sus visitas se limitan a periodos muy marcados del calendario, pero cientos de personas -voluntarias y profesionales- han convertido este quehacer en su trabajo diario.

Así, entidades como la Asociación Española Contra el Cáncer, pequeños "circos" como el Piruleto, diseñan conjuntamente con el personal sanitario actividades encaminadas a conseguir ese fin y que los niños dispongan de actividades lúdicas y formativas similares a las que podrían encontrar fuera del hospital, y existen hasta profesores que acuden regularmente a los hospitales para que esos pacientes no pierdan el ritmo de las clases.

En el caso de aquellos enfermos que a causa de su patología no pueden desplazarse a los talleres y actividades lúdicas, como los que se encuentran en unidades de cuidados intensivos, estos "repartidores" de sonrisas se encargan de visitarlos uno a uno.

Entre las iniciativas solidarias para atender a niños enfermos destaca la propuesta que se ha puesto en marcha en la azotea del hospital madrileño La Paz.

Allí, y gracias a la colaboración también desinteresada del arquitecto Joaquín Torres, se va a construir un gran jardín donde se van a realizar juegos al aire libre o talleres de jardinería, un lugar donde los niños podrán también disponer de las videoconsolas y videojuegos que esta asociación recolecta desde hace años para llevarlas a los hospitales.

El arquitecto ha diseñado tres áreas de juego circulares sobre un césped artificial, decoradas con árboles para trasladar la naturaleza a quienes por estar ingresados no pueden acceder a ella.

Varias empresas han contribuido a poner en marcha este proyecto, pero sus promotores aún no han conseguido la totalidad de los fondos que necesitan para culminarlo, por lo que hacen un llamamiento a particulares y empresas para se sumen a él.