Una mexicana que participaba supuestamente en un ritual satánico en el Estado de México dejó ciego a su hijo de 5 años al sacarle los ojos, informaron hoy fuentes médicas y del municipio de Nezahualcóyotl, en el centro del país.

Una representante del ayuntamiento de esta localidad dijo que siete personas fueron detenidas por policías municipales y agentes de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México, entre ellos la presunta agresora, identificada como Carmen Ríos García, de 23 años.

"Lo que creemos, es una hipótesis, es que era un ritual satánico. Ellos hablan de ceremonia religiosa", declaró Mayra Pérez, subdirectora de información del ayuntamiento de Nezahualcóyotl, en el centro de México.

Los hechos ocurrieron hoy en la colonia San Agustín Atlapulco, donde diez personas, tres de ellas menores, estaban encerradas en una vivienda realizando "una ceremonia religiosa", explicó la fuente.

Uno de los presentes, hermano de la supuesta agresora, dijo a las autoridades que la mujer "tenía al menor" de 5 años "en sus brazos" y pidió a los demás asistentes a la ceremonia que cerraran los ojos.

Fue entonces cuando al parecer sucedió la agresión contra el menor, identificado como Fernando, cuya madre le metió los dedos en los ojos y le dejó ciego, añadió la fuente.

Alertados por familiares del menor y de la agresora, policías municipales trasladaron a Fernando a un hospital local y desde allí, por la gravedad de las heridas, en helicóptero, a otro de la Cruz Roja primero y después al Pediátrico de Tacubaya de Ciudad de México, donde la salud del menor es estable, según fuentes médicas.

El tío del niño agredido, Jesús Ríos, de 25 años, afirmó que varios de los presentes en la ceremonia, que se celebraba desde hace varios días, estaban bajo el influjo de "alguna droga o en shock", lo que impidió auxiliar al pequeño.

La Fiscalía del Estado de México ha abierto una investigación sobre los hechos y por ahora se desconoce si alguno de los adultos que se encontraban presentes en el momento de la ceremonia será procesado.

Además de los arrestados, un menor de 8 años y un bebé de nueve meses fueron rescatados en el inmueble donde sucedió el aparente ritual.

Sobre el estado de salud de Fernando, fuentes de la Secretaría de Salud del Distrito Federal dijeron que se encuentra sedado, fuera de peligro, pero con "un traumatismo severo en ojos que le provoca la lesión irreversible" y le ha dejado ciego de por vida.

El parte médico señala que "después de un encierro de cuatro días, la madre seguramente no lo soportó y en un acto de histeria o desesperación se lanzó contra niño de 5 años", al que provocó lesiones fatales con sus propios dedos.

El pequeño también presenta mordiscos en un brazo y una oreja, agregó la misma fuente.