La Autoridad de Gestión de la Deuda Pública de Grecia (PDMA) advirtió ayer de que los acreedores que no se acojan al proceso de quita de la deuda no recibirán fondos procedentes del nuevo préstamo internacional por valor de 130.000 millones de euros.

"El programa económico de Grecia (financiado por la UE y el FMI) no contempla que haya fondos disponibles para hacer pagos a los acreedores del sector privado que declinen participar en la PSI (Participación del Sector Privado, como se conoce oficialmente la quita)", avisó la PDMA en un comunicado.

La PSI deberá suponer la condonación de unos 107.000 millones de euros, es decir, el 53,5 % del monto de los bonos tenidos por grandes bancos privados y fondos de inversión.

Los bonos serán sustituidos por nuevos títulos griegos por un valor del 30,5 % de los actuales, de 20 años de vencimiento a contar desde 2023.