El pueblo santacrucero de San Andrés y, con él, el resto del distrito de Anaga contarán en breve con unas dependencias para los Servicios Sociales mucho más amplias que las que tenían hasta ahora. La Asociación de Vecinos El Pescador ha cedido recientemente al ayuntamiento el local del que disfrutaba hasta ahora y se ha trasladado a unas dependencias superiores, lo que ha permitido que el personal del área social disponga en breve, desde que se terminen las actuaciones de adaptación, de un espacio mucho más amplio para atender la creciente demanda que ha experimentado en los últimos años este departamento por la incidencia de la crisis económica en buena parte de la población.

El concejal del área social, José Manuel Arocha (PSC), subrayó ayer la importancia histórica de este paso para San Andrés y el resto de Anaga, agradeció el gesto de la AAVV y se comprometió a ampliar el personal de su departamento en el futuro, si bien matizó que ahora ya se cuenta con un trabajador más por la gestión de la Prestación Canaria de Inserción.

Este paso implica, entre otras cuestiones, un reforzamiento de la Unidad de Trabajo Social (UTS) en esta zona, lo que se une al ya dado en Añaza, que cuenta desde hace semanas con un local más amplio para la UTS y un empleado más. Asimismo, lo mismo se prevé para El Sobradillo, donde se abrirá una unidad de menores mediante unas dependencias con más amplitud. El programa se extenderá a la UTS de Ofra y del resto de los siete distritos.

La citada AAVV de San Andrés mostró ayer su satisfacción por este paso y, en declaraciones a EL DÍA, pidió también al ayuntamiento que intervenga con celeridad para reforzar la seguridad en la ladera del pueblo, aparte de limpiar las redes hidráulicas ya inservibles y sueltas.

Al concejal no le consta

El concejal de Obras y Servicios, Dámaso Arteaga (CC), indicó ayer a EL DÍA que no le consta si la situación de esa ladera presenta dificultades en la actualidad, aunque se comprometió a estudiarlo y actuar en consecuencia.

Respecto a las críticas de algunos vecinos por la altura a la que han quedado las rocas del reforzamiento del litoral del pueblo, el edil subraya que se trata de una decisión provisional de Costas para ofrecer las máximas garantías de seguridad ante posibles crecidas del mar y a la espera de que se elabora el proyecto y las obras de la ansiada escollera.

En este sentido, la Autoridad Portuaria indicó ayer a EL DÍA que en breve habrá una reunión con los técnicos que están redactando el proyecto para conocer el momento en que se encuentra ese documento y los plazos futuros. La Autoridad se comprometió a asumir los 200.000 euros que costaría esa redacción, mientras que la demarcación de Costas ha aportado unos 500.000 para las obras de urgencia tras los desperfectos del pasado mes de agosto.

Los vecinos mantendrán hoy una nueva reunión porque no están muy satisfechos con la pérdida de visión del mar que tienen ahora, aunque sea temporal.