Si, durante la madrugada de hoy a mañana, vuelve a vivirse una subida del mar en San Andrés nunca antes vista, con múltiples daños y destrozos en viviendas y comercios, no será porque el ayuntamiento no ha tomado medidas preventivas. Ésa es la impresión que tienen, en general, los vecinos del célebre pueblo, que asisten con mayor sosiego y tranquilidad que nunca a la plenamar anunciada para esta madrugada y los próximos días, después del precedente casi traumático de finales de agosto, cuando se vivieron escenas nunca experimentadas en la zona, según los propios residentes.

Durante la mañana de ayer, la tranquilidad y el ritmo habitual de vida eran la tónica en San Andrés y la playa de Las Teresitas. Los comercios, bares, restaurantes, el supermercado situado en frente del final del barranco y otros negocios permanecían abiertos y sus clientes apenas hablaban de lo que se prevé para esta madrugada, salvo que se le preguntara por ello. En ese caso, y en su mayoría, se mostraban tranquilos y hasta destaca las obras y las medidas preventivas adoptadas por el consistorio en los últimos días, actuaciones que han supuesto un desembolso de 100.000 euros.

Ha sorprendido tanto el interés y la precaución mostrada en esta ocasión por el gobierno municipal, que un vecino, incluso, afirma que no existen precedentes de una intervención así y se muestra seguro de que, salvo sorpresa o "cuasi maremoto", las afecciones por la subida del mar serán mínimas o, eso sí, mucho menores que las de finales de agosto.

En este sentido, se subraya la colocación de piedras de gran tamaño en lugares donde antes no había, lo que contribuyó a incrementar los daños hace un mes. Además, se han creado cauces para una rápida evacuación del agua que, según los vecinos, también minimizarán los daños.

En general, los residentes no temen grandes daños, aunque sí les fastidiaría que, de nuevo, sus pymes y casas se vean inundadas por el agua salada. Entre las anécdotas de los últimos días, algunos aluden al "extraño viento que se metió en el pueblo justo cuando se produjo el mayor movimiento sísmico en El Hierro, lo que me despertó", según comenta un residente.

El gobierno local contribuyó sobremanera el pasado viernes a tranquilizar a los vecinos al detallar las obras. Los concejales Dámaso Arteaga y Fernando Ballesteros se reunieron con representantes de la Asociación de Mayores San Andrés de Anaga, AAVV El Pescador, Club Antequera, Cofradía de Pescadores, las AAVV Haineto Príncipe de Anaga, Los Pedacillos, Cultural IBaute, Cultural Amautama, El Muellito, Asociación Asio, Asociación Emerger, Hamburguesería Rivero, Empresarios de Anaga, Bar La Marina y Asociación de Mujeres Ágora.

Durante la cita, se explicaron obras como el recrecido de la escollera actual en altura y longitud, la mejora de la canalización de tuberías de saneamiento y aguas negras, la de la red de evacuación de aguas pluviales y de las que llegan de los rebosos del mar. Además, se limpió la desembocadura del barranco de El Cercado y se señalizó todo el espacio afectado por los trabajos motivados por última pleamar. Las piedras de protección colocadas son 30 y de las denominadas New Jersey, de tres metros de longitud y similares a las de las medianas de las autopistas, así como otras de cuatro toneladas que refuerzan las zonas delicadas.