Miguel Cabrera Pérez-Camacho (octubre, 1954), diputado regional del PP, siempre habla claro, tanto de su partido como del resto. Así, advierte a su "indiscutido" líder regional, José Manuel Soria, de que si se va a Madrid tras las elecciones generales, "lo hará con todas sus consecuencias", entendidas estas como la necesidad de buscar un sustituto, que podría ser él mismo.

No acudió a votar al pleno en el que se designó a los senadores autonómicos. ¿Se debe a la frustración de verse en la oposición?

Tenía mucho trabajo en el despacho y como era un pleno intrascendente me excusé con Australia Navarro. En la oposición me voy a divertir mucho. Para un diputado que no aspira a otra cosa que al buen debate y a poner un grano de arena a favor de nuestra gente es mucho más placentero estar en la oposición que en el gobierno, porque en el gobierno hay que guardar muchas cautelas. Incluso tragarse algún sapo que otro. Pero en la oposición puedes dar caña a diestra y siniestra.

El PP ha dicho que va a hacer una oposición constructiva. ¿Realidad o imagen?

Va a ser constructiva, pero también va a ser fiscalizadora. Y eso ya se está comprobando. Lo que no va a ser es destructiva como lo fue cuando estuvo Juan Fernando López Aguilar en el Parlamento. Aquello sí fue una oposición destructiva. Jamás aportó nada nuevo. Lo que hizo fue intentar desprestigiar y derruir cualquier labor positiva del Gobierno de Canarias.

Pero para un partido que ganó las elecciones con más de 63.000 votos de diferencia, ¿no es frustrante ocupar los escaños de la oposición?

Es frustrante, pero es la ley. Es el sistema electoral. No puedo decir ahora, cuatro años después, que lo que nosotros hicimos en el 2007 era correcto y lo que ahora han hecho con nosotros no lo es. La ley ampara a las mayorías, con independencia de quién ha ganado o perdido las elecciones. Sabíamos que esta posibilidad podía pasar. Tal vez José Manuel Soria erró al pensar que podía tener apoyos de ciertos fantasmas políticos que luego apoyaron a Paulino Rivero.

¿O sea, que fue un error de estrategia Soria?

No. José Manuel contaba con determinados apoyos que le habían ofrecido algunos fantasmas políticos, que luego terminaron apoyando a Paulino.

¿Piensa igual de la estrategia de Tenerife, y, en concreto, de Santa Cruz?

Lo que ha ocurrido en Tenerife es una consecuencia de lo otro. Si en el Gobierno hubiéramos contado con apoyos suficientes para gobernar, no hubiese ocurrido en Tenerife lo que ocurrió. Influyeron mucho las instrucciones directas de Ferraz de pactar con CC y no con el PP. Fue una orden terminante que violentó y humilló a muchos socialistas de Tenerife, que querían lo contrario. Las únicas desobediencias han tenido lugar en La Palma. Fueron los únicos que se atrevieron a enfrentarse a esas directrices de Ferraz. Por lo demás, el PSOE de Tenerife ha quedado completamente desarticulado. Entre Socialistas por Tenerife y la sumisión que han tenido que demostrar a las directrices de Ferraz, el PSOE en Tenerife está absolutamente tocado y en las elecciones generales dará un bajón impresionante.

Le decía lo de Santa Cruz porque hubo voces que pusieron en duda la capacidad de liderazgo de Cristina Tavío.

Es difícil saber si otro tipo de ofertas hubiesen tenido mejor encaje. Pero dudo mucho de que, se le ofreciera lo que se le ofreciera por parte de Cristina o de Antonio, el PSOE de Tenerife hubiese desobedecido la directriz de Ferraz. Aunque se le hubiese ofrecido la Alcaldía o la Presidencia del Cabildo, dudo de la capacidad del PSOE de Tenerife para enfrentarse con la dirección federal.

¿No considera, pues, un fracaso la gestión de sus compañeros?

Es muy difícil que Cristina o Antonio pudiesen hacer ofertas tan tentadoras como para que se produjera una desobediencia a Ferraz. No se puede lanzar esa acusación a Tavío y Alarcó, porque se vieron envueltos en una dinámica de obediencia cerrada a la dirección federal del PSOE.

Volviendo al principio. Se baraja un escenario electoral de adelanto de elecciones a noviembre. Si las encuestas se mantienen el PP sería el ganador, incluso, con mayoría absoluta.

Estoy convencido de que vamos a ganar con mayoría absoluta.

¿Y ve en ese nuevo Ejecutivo a José Manuel Soria?

Tiene categoría más que sobrada para ser ministro del Gobierno de la Nación. He conocido muchos ministros, de diversos partidos, que no le llegan a los talones a Soria.

¿Compaginando con el liderazgo del partido?

No. Si Soria se queda en Canarias es el líder indiscutido del partido. Ahora bien, si se va a Madrid se va con todas las consecuencias. Entonces, en el siguiente congreso regional tenemos que elegir un nuevo presidente. Ya tenemos experiencia sobrada en otras formaciones políticas de que los partidos en Canarias no se pueden dirigir con móvil desde Madrid.

Esa es toda una declaración de intenciones. ¿Se ve presidiendo el PP canario?

No voy a precipitarme porque ahora no toca hablar de eso, entre otras cosas porque el congreso regional sería después de las generales, en 2012. Además, pienso que debería partir de una base consensuada dependiendo de lo que pase con José Manuel que, insisto, es el líder indiscutido si se quiere quedar. Pero si hay que elegir un nuevo presidente, no descarto nada. Ni la presidencia regional ni la insular, porque ya Cristina ha dicho que está cansada y que le gustaría ir pensando en otras cosas. Es lógico, porque lleva muchos años de presidenta y ya ha hecho su labor.

Por cierto, ¿cómo califica su trabajo al frente del partido?

Todos han cometido errores. Los tuvo Cristina, y lo dije en su momento, por ejemplo, con la política llevada a cabo en el pasado mandato en el Ayuntamiento de Santa Cruz. Fue una política que no compartí porque me parecía fratricida. También Soria cometió errores, y, sin embargo, es nuestro líder. No se debió aprobar la Ley de Comercio, no se debió apoyar el viaje de Paulino Rivero a Cuba, pero sin duda alguna han sido muchísimos más los aciertos que los errores.

¿Considera que tiene el respaldo suficiente para afrontar un proceso tan complejo como el de liderar el partido?

Insisto en que lo mejor es consensuar las cosas, de tal manera que tanto en una alternativa como en la otra fuese algo de integración. Que no hubiese combates. Pero eso no siempre es posible. Tampoco es insano que lo haya.

Aunque hablamos de hipótesis, ¿cree que Gran Canaria aceptaría un presidente de Tenerife?

La proporción de fuerzas justifican ahora que pueda haber una alternativa de Tenerife. Además, ni entramos en lo de establecer la alternancia. Si se considera oportuno que el presidente regional sea de Tenerife habrá acuerdo en ese sentido, pero no por imponer una alternancia. Si surge uno mejor en Gran Canaria no se nos caerán los anillos en Tenerife por apoyarlo.

El PP ha sido, en ese sentido, el que mejor ha digerido ese asunto.

Eso no será un problema.

Por cierto, ¿qué tal el nuevo grupo parlamentario?

(Risas). La dirección del PP me quiere como su reserva espiritual.

Por otro lado, el Parlamento eligió esta semana a Miguel Zerolo como senador autonómico.

No, a Miguel Zerolo lo eligió Coalición Canaria. A Miguel lo aprecio, es buen amigo de toda la vida, pero quien lo eligió fue CC. Cada partido votó a su candidato. Que no se diga que el PP eligió a Domingo Fuentes y a Zerolo.

Como profesional del Derecho que es, ¿teme que la imagen de un diputado, ahora senador, imputado como Zerolo pueda empañar la imagen del Parlamento regional?

Creo que no. Mientras esté imputado no se le puede exigir a un político. Cada persona puede reaccionar como quiera, pero son contrario a admitir que una imputación sea causa de dimisión. Eso sería tanto como dejar en manos de los jueces el que una persona se presente a un cargo o no. Y lo jueces son importantes cuando dictan sentencias, pero no cuando hacen una imputación, porque ha habido cientos de imputados que luego han resultado inocentes. Por tanto, creo que una imputación no es causa para que un político no esté en la vida política; la sentencia sí. Conozco a los jueces, y sería exagerado dejar que la palabra de un juez, por medio de una citación como imputado, decidiera si una persona va en listas o no. Me niego a aceptarlo.

Ha decidido donar el sueldo del Parlamento a Aspronte.

Sí. La anterior legislatura decidí que mi sueldo se quedara en el Parlamento, y esta vez he decidido que lo reciba Aspronte, en lugar de que lo utilice la Mesa para financiar sus viajes a Cuba.

Por cierto, fue crítico con Paulino Rivero siendo socio de Gobierno. ¿Qué opinión le merece su reelección?

Con un mandato, más que de sobra. No entiendo que esté otros cuatro años. La vida política tiene estas injusticias. Rivero no ha tenido capacidad de gestión ni prestigio en sus actos para ser otra vez presidente de Canarias. Todavía debe estar pellizcándose. Su actitud de apoyo descarado a Rodríguez Zapatero, a una política de burla hacia Canarias, sobre todo con el Plan Canarias, no tienen nombre. Y todavía se jacta de ello. Solo vela por los intereses partidarios de CC, no por los de la Comunidad Autónoma.