El gabinete de coalición de centro-derecha encabezado por Pedro Passos Coelho y compuesto por once ministros gobierna desde ayer Portugal con el cometido de superar la peor crisis económica de los últimos 35 años de democracia lusa.

Passos Coelho, líder del Partido Social Demócrata (PSD, centro-derecha), sustituyó en el cargo de primer ministro al socialista José Sócrates (2005-2011) tras tomar ayer posesión de sus funciones en una ceremonia celebrada en el Palacio de Ajuda, en Lisboa, que estuvo presidida por el jefe del Estado luso, Aníbal Cavaco Silva.

En su primer discurso dirigido a la nación como primer ministro, el dirigente conservador, de 46 años, se centró en la crisis económica que atraviesa el país y se comprometió a combatirla "sin optimismos vacíos ni fatalismos estériles" y con la convicción de que Portugal "no puede fallar".

"Aumentar la tasa de ahorro se convirtió en un imperativo económico de primer orden para la recuperación de la economía", subrayó el conservador Pedro Passos Coelho, quien lidera una alianza gubernativa con los democristianos del CSD-PP que le asegura la mayoría absoluta en el Parlamento portugués (132 de 230 escaños).