Las protestas masivas durante la huelga general en Grecia contra las nuevas medidas de austeridad se saldaron ayer con al menos 40 heridos, de ellos 35 policías, y más de 25 detenidos, según informaron fuentes policiales.

Un portavoz de la Policía de Atenas informó de que 35 agentes tuvieron que recibir asistencia médica tras ser agredidos con piedras y palos, y de que "al menos cinco ciudadanos" fueron atendidos con heridas en hospitales locales. De los detenidos, al menos tres permanecen encarcelados hasta comparecer ante un fiscal, indicó la Policía.

Las manifestaciones convocadas ayer con motivo de la tercera huelga general del año se desarrollaron de forma pacífica, y los incidentes violentos comenzaron al acabar la marcha sindical.

En los aledaños del Parlamento grupúsculos radicales se enfrentaron a los policías con bombas incendiarias, botellas y piedras, lo que obligó a los antidisturbios a emplear gases lacrimógenos y lanzar varias cargas. Como resultado, el centro de la ciudad presentaba una imagen de devastación propia de un campo de batalla, con contenedores en llamas y mobiliario urbano destrozado.

Horas antes, grupos de "indignados", que llevan más de 20 días en la plaza Sintagma protestando contra el Gobierno, intentaron romper el cordón policial para bloquear el acceso de los diputados al Parlamento, donde se tramitaba el nuevo paquete de medidas.