La campaña electoral para la Presidencia de Perú entró hoy a la primera de las dos jornadas de reflexión antes de los comicios del domingo, con el intento de los candidatos de convencer a los indecisos ante lo ajustado de los pronósticos.

La etapa final de una campaña de casi dos meses se cerrará con la incertidumbre de gran parte de la población, ya que todos los sondeos, que no se pueden difundir por ley en Perú, ratifican que se mantiene una pugna cerrada en las preferencias.

En medio de esta disputa, y luego de que el nacionalista Ollanta Humala y la populista Keiko Fujimori cerraran anoche sus campañas con multitudinarios mítines en Lima, hoy fue el candidato quien mantuvo la iniciativa, al participar en diversas reuniones con la prensa nacional y extranjera.

Humala manifestó su certeza de obtener una victoria, rechazó nuevas imputaciones de sus supuestos vínculos con Hugo Chávez y denunció que el gobierno del presidente Alan García está favoreciendo la candidatura de Fujimori.

"Vemos con optimismo el 5 de junio, algo que veo en las calles, más que en las encuestas. Creo que el pueblo peruano va retomando la memoria", declaró a la prensa extranjera en Lima, para luego también pedir a la embajada de EE.UU. que se pronuncie sobre una denuncia de que él recibe financiación del régimen de Chávez.

Humala afirmó que tiene "indicios razonables de que el gobierno (peruano) no es imparcial" y mostró su preocupación porque cree que en las elecciones del domingo "hay que respetar la voluntad popular", aunque no quiso pronunciarse ante la posibilidad de que pueda existir fraude.

Además, se hizo eco de una denuncia publicada por el diario La República, que da cuenta de unas grabaciones con supuestas interceptaciones de conversaciones en su sede partidaria.

Igualmente, se dirigió a la embajadora de EE.UU., Rose M. Linkis, para pedirle que se pronuncie sobre la denuncia de Roger Noriega, exsubsecretario de Estado para América Latina, de que su campaña está siendo financiada por el régimen de Hugo Chávez.

"Rechazamos esa calumnia totalmente", enfatizó el candidato, para luego considerar que se trata de "un acto irresponsable de este exembajador, que a título personal dice mentiras y no tiene pruebas para justificarlas", algo que es "una intromisión en los asuntos internos del Perú".

Según reseñaron hoy los medios locales, Noriega declaró a una cadena de televisión de Estados Unidos que el dinero que recibe Humala llega desde Caracas vía La Paz, aunque dijo que no podía revelar la procedencia ni identidad de sus fuentes.

El candidato también ratificó que de obtener el triunfo formará un gobierno de "concertación nacional" y admitió que ha tenido que hacer cambios a su plan de gobierno original para "aclarar temas controversiales".

Keiko Fujimori, por su parte, se mantuvo alejada del asedio mediático y solo se comunicó por teléfono con la emisora Radio Programas del Perú (RPP) para pedirles a sus compatriotas que voten por ella.

La candidata aseguró que "los peruanos reclaman un cambio viable, sin enfrentamientos, sin violencia, un cambio para el desarrollo, un cambio sin intromisiones de presidentes extranjeros".

Remarcó, de inmediato, que su partido, Fuerza 2011, es "un proyecto peruano" y dijo que el de Humala es un proyecto "bolivariano", vinculado con Hugo Chávez.

"Nosotros no somos parte de ese proyecto bolivariano, controlado por el señor Hugo Chávez, que solo lleva pobreza, inflación y autoritarismo a esos países", acotó.

Keiko mencionó una información periodística que ayer denunció supuestos vínculos de Humala con narcotraficantes mientras dirigía una base militar en la selva peruana, en la década de los noventa.

Los peruanos, indicó, "merecen una explicación de las denuncias de colaborar con el narcotráfico para facilitar vuelos con cargamento de droga en la selva y cobrar cupos de 10.000 dólares a los narcotraficantes".

La candidata señaló, por otra parte, que su partido "apuesta por un Perú independiente, integrado a la comunidad económica internacional" y ofreció trabajar por una educación inclusiva, formar un país competitivo, mejorar la salud, fortalecer la seguridad ciudadana y luchar contra el narcotráfico.

"Para que todo esto sea realidad, el Perú tiene que seguir creciendo, generando las condiciones para crear oportunidades, brindando confianza y estabilidad económica, con reglas claras y respeto a los compromisos ya adquiridos", concluyó.