El líder canario del Partido Popular (PP), José Manuel Soria, anunció ayer, justo antes de la escenificación de las negociaciones entre socialistas y nacionalistas para pactar el gobierno regional -con la prensa convocada-, que sostiene contactos en paralelo con "otras fuerzas, políticos y diputados" a fin de intentar amarrar un acuerdo que asegure la Presidencia autonómica a su partido.

Soria aseveró que "hay muchos dirigentes en Coalición Canaria (CC) -quiero decir que no son uno ni dos- que están diciéndome directamente que quien debe presidir el gobierno canario es el PP y por tanto, yo, y que no comparten esta estrategia suicida que ha emprendido el candidato nacionalista de poner por encima de todo lo demás en Canarias su permanencia en la Presidencia del Gobierno", en referencia al aspirante nacionalista y mandatario regional en funciones, Paulino Rivero.

Momentos antes había asegurado que en el PP hay 21 diputados que ayer se comprometieron "todos ellos" a votar la investidura de Soria, mientras que "otros no pueden decir lo mismo, pues contaban con 21 diputados, pero a partir de ahora, según distintas informaciones aparecidas en los medios, hay dudas sobre cuatro".

Aludía así a la información publicada en este periódico sobre la posibilidad de que los cuatro diputados electos de CC por La Palma respalden a Soria -en vez de a Rivero- si la Isla no entra en el pacto regional.

"Si aparte de esos cuatro aparecen otros dos con dudas, ya no serían sino 15 (los diputados electos de CC), igual que la tercera fuerza política", apuntó. "Lo decimos como reflexión porque cuando se empieza no reconociendo quién ha ganado las elecciones, se acaba perdiendo incluso una parte de los que creían tenían con toda seguridad", recalcó.

Soria señaló que durante la campaña electoral dijo "muchas veces" que si el PP ganaba, hablaría con la segunda fuerza política y, si no era factible un acuerdo, con la tercera, y que si tampoco resultaba, "intentaría la investidura con un gobierno en el que hubiera, al menos, un socialista y un nacionalista de peso".

"Lo dije entonces y lo sigo manteniendo porque ahora hay alguno que se sorprende de que pueda intentar un pacto al margen de los partidos que quedaron en el segundo y tercer lugar: que nadie se sorprenda porque ya lo dije", insistió.

"Yo estoy en ese tercer escenario, que es intentar conformar una mayoría con una personalidad del PSC y otra de CC", ratificó. "Por lo que me dicen, algunos dirigentes de CC y PSC, ese pacto de CC con PSC a día de hoy tiene poca probabilidad: es más, alguno de los que conforman CC ponen en cuestión la investidura de Rivero a la luz de cómo resulten otros acuerdos en distintos municipios".

Por ese motivo, y desde que el PSC dejó claro que tenía prohibido pactar con el PP, "se iniciaron conversaciones con otras fuerzas, diputados y políticos de Canarias para conformar una mayoría. Que no le quepa a nadie la menor duda de que estamos en esas conversaciones", aseguró.