A la patronal madrileña se le está agotando la paciencia por la "ruina" que causa a sus negocios la acampada del Movimiento 15-M, por lo que pusieron sobre la mesa "una fecha tope" para llegar a una "solución inmediata", que "podría ser el lunes o el martes" de la semana próxima.

Así lo manifestó ayer el presidente de CEIM-CEOE, Arturo Fernández, al término de la reunión que él y el presidente de COCEM, Hilario Alfaro, entre otros representantes de los empresarios, comerciantes y hoteleros, mantuvieron durante algo más de hora y media con la delegada del Gobierno, Dolores Carrión, la segunda que celebran tras la del 24 de mayo por este asunto.

Carrión matizó las palabras de Fernández: "Evidentemente ellos (los representantes de los empresarios y comerciantes) no nos pueden poner una fecha. Lo que sí hay es una fecha para yo darles cumplida información de todo el trabajo que estamos desarrollando".

"Hemos quedado que el lunes y el martes estoy abierta a recibirles de nuevo y ojalá ya esté solucionado para entonces", añadió.

"Nos ha puesto una hoja de ruta y puede ser inminente que un día de estos se arregle, pero es un plan secreto", apostilló Fernández.

Alfaro explicó que le pidieron a la delegada del Gobierno que recupere para Madrid el "principio de autoridad" y le preguntaron quién está financiando "esta historia" de la Puerta del Sol, "porque por ahí", considera, "posiblemente venga la solución".

En su opinión, los chavales acampados "querían hacer una revolución y les ha salido una romería".

Alfaro reconoce, no obstante, que los acampados están cumpliendo con las tres peticiones que les hicieron: que mientras dure el campamento éste se separe cinco metros de las fachadas de los comercios, dejar libres las calles adyacentes y suprimir los carteles de los escaparates.