Bildu ha colocado hoy la "pelota" en manos del resto de partidos, una vez que ha mostrado su disposición a gobernar donde ha obtenido mayorías y a hablar de su programa y no de "intercambio de cromos", aunque no ha cerrado la puerta a pactos con otras fuerzas, siempre sobre esa base.

Los portavoces de Bildu, Pello Urizar, Oskar Matute y Bakartxo Ruiz, han dicho que pueden y deben gobernar en San Sebastián y Guipúzcoa por ser la fuerza más votada y que serán otros partidos los que tendrán que ponerse de acuerdo si quieren impedir el acceso de la coalición a ese Ayuntamiento y a la Diputación Foral.

No han rechazado la posibilidad de gobernar en coalición con otras formaciones, pero esperarán a que comience la ronda de contactos para ver cuál es la "voluntad" que tiene cada uno después de analizar sus respectivos programas.

Creen que el PNV, al anunciar ayer que postulará a su candidato Markel Olano a diputado general de Guipúzcoa, está gestionando "sus propios tiempos".

"No es una foto fija. Lo que ha dicho Joseba Egibar da lugar a todo tipo de escenarios finales", ha señalado Matute en una rueda de prensa que Bildu ha celebrado en un hotel de San Sebastián.

Ha señalado que Bildu ya ha puesto "todas sus cartas sobre la mesa" y no comprenden cómo otros dirigentes políticos se plantean que la coalición pueda renunciar a gobernar allí donde ha ganado, "cuando ha sido decisión de la ciudadanía".

Sin embargo, sí entienden que Bildu debe ofrecer sus votos para impedir gobiernos del PP y UPN porque ambos niegan "dos columnas principales" de su proyecto: "la existencia de Euskal Herria como pueblo y su legítimo derecho a decidir y la apuesta por una transformación social desde la izquierda".

A los socialistas no les han incluido en ese bloque, pues según Matute "el PSE/EE tiene bastante con lo que le ha caído", ya que "nadie piensa que vaya a tener un papel principal" en las negociaciones postelectorales.

Urizar ha dicho que la renuncia de Odón Elorza a la reelección como alcalde de San Sebastián es "consecuente" con lo que el candidato del PSE/EE dijo en campaña, aunque Matute ha apostillado que debería hacerse una reflexión sobre el trabajo que se hace por la ciudad "en función de si se gobierna o no".

Y es que Bildu, ha subrayado, será "activo y proactivo" también si no gobierna, en algunos casos "para evitar males mayores".

Urizar, por su parte, ha aclarado que no están "en contra de acuerdos entre otros", pero ha asegurado que hasta ahora nadie ha dado "argumentos de peso" sobre por qué Bildu no puede gobernar donde ha ganado.

"No es el momento de buscar tres sillones aquí y una alcaldía allá. Es el momento de Euskal Herria, y todos tenemos la obligación de actuar con altura de miras", ha destacado.

Ha señalado que les "satisface" el apoyo que han recibido de los electores y ha añadido que "a la Euskadi real de la que tanto hablan algunos, y que les ha vuelto la espalda, también le interesa el asunto nacional".

Urizar, que ha leído un texto es castellano al que en euskera ha dado lectura Ruiz, ha insistido en que Bildu y la sociedad vasca han iniciado "una carrera de fondo" en la que no van "a jugar al cortoplacismo".

Se han reafirmado en que la coalición, cuando se inicie la ronda de contactos con otras formaciones, no participará "del mercadeo de contraprestaciones" a las que les tienen "acostumbrados" otros partidos.

"Los votos de Bildu no exigen contraprestación alguna, pero la ciudadanía ha demostrado que sí juzga, que valora y que vota en consecuencia. Ante la sociedad nos tenemos que retratar todos", ha recalcado.

ab/jmi

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