Un grupo de investigadores españoles ha constatado la eficacia en el tratamiento del Alzheimer de una terapia de estimulación sensorial que "estimula el cerebro del enfermo" por medio de sonidos y de música.

Así lo puso de manifiesto hoy el investigador del Instituto de Neurociencias de la Universidad de Salamanca (oeste de España) Juan José García Meilán en la presentación del estudio.

El estudio, señaló García Meilán, forma parte de un programa de intervención en las áreas de funcionamiento psicológico del paciente, en sus funciones cognitivas, neurológicas, emocionales, funcionales y sociales.

La experiencia, que se ha llevado a cabo en el Centro de Referencia Estatal de Atención a Personas con Enfermedad de Alzheimer y otras Demencias, se ha desarrollado durante dos años con más de una treintena de pacientes de entre 60 y 80 años.

"No estamos hablando de curar -apostilló el científico-, pero sí de intentar mantener a los enfermos con un nivel de activación alto para que tengan la mayor calidad de vida posible".

La novedad del método respecto a los programas que ya existen estriba, en palabras de García Meilán, en que "intenta trabajar todos los aspectos cognitivos del paciente", y en especial "la atención, la motivación y las emociones".

Entre las terapias nuevas que se han desarrollado, mencionó la estimulación sensorial, sobre todo auditiva, con la que se agudiza "el cerebro del anciano por medio de sonidos y de música".

A ella se añade "la retroalimentación cerebral", que consiste en que el paciente mueva una serie de elementos de un ordenador, mientras mantiene la atención.

La terapia también incluye "el fomento de la estimulación aeróbica" con el objetivo, según el científico, de "oxigenar el cerebro del paciente para mantener su eficacia y compromiso cognitivo".

Asimismo, se incluye la estimulación de la memoria autobiográfica por medio de pistas musicales, con la que se pretende, según sostuvo, "provocar al enfermo recuerdos a partir de música de diferentes tipos, ya sea triste o alegre".

García Meilán hizo hincapié en que el programa "está dotado de un sistema de evaluación", lo cual permitirá "controlar su eficacia terapéutica".

Según resaltó el director del Instituto de Neurociencias, Miguel Ángel Merchán, este método establece "las pautas que habrá que seguir en el futuro para intentar estimular la plasticidad del sistema nervioso".