La Corte Internacional de Justicia (CIJ) se declaró hoy sin jurisdicción para tramitar la demanda presentada por Georgia contra Rusia, a la que acusa de limpieza étnica en los territorios separatistas georgianos de Osetia del Sur y Abjasia.

Los jueces consideraron que las partes no mantuvieron las negociaciones que establece el artículo 22 de la Convención contra Discriminación Racial, de 1965, en la que Georgia basa su demanda, como condición previa antes de elevar el caso a la Corte de la ONU.

"La Corte concluye por diez votos a favor y seis en contra que no tiene jurisdicción para tramitar la demanda presentada por Georgia el 12 de agosto de 2008", manifestó el presidente de la CIJ, Hisashi Owada.

Los magistrados reconocieron que "ha existido una disputa" entre Georgia y Rusia por discriminación racial, con lo que rechazaron la primera de las objeciones presentadas por Rusia.

Rusia mantenía que el litigio con Georgia, de existir, debería de basarse en el uso ilegal de la fuerza y no en la Convención contra la Discriminación Racial.

Los jueces precisaron que la disputa por discriminación racial solamente existió "entre el 9 y el 12 de agosto de 2008", es decir, después de que se iniciasen los enfrentamientos armados en Osetia del Sur y hasta el día en que la demanda fue presentada.

La secretaria de Estado de Justicia de Georgia, Tina Burjaliani, reconoció al final de la lectura del fallo la "decepción" de Georgia por las conclusiones de la Corte, pero aplaudió el hecho de que se haya reconocido la existencia de una disputa.

"Estamos satisfechos de que la Corte haya dicho que existe una disputa entre Georgia y Rusia (por discriminación racial) y no entre Georgia y Osetia del Sur", tal como mantuvo Moscú durante las audiencias, dijo.

Burjaliani no descartó que Georgia vuelva a denunciar a Moscú con otra demanda y señaló: "este fallo no es el final de este caso".

Precisó que Tiflis "va a estudiar" la decisión de la Corte antes de decidir qué pasos sucesivos dará contra Moscú.

Por su parte, el consejero legal del Ministerio ruso de Asuntos Exteriores, Kirill Gevorgian, indicó a la prensa que el fallo recoge "exactamente lo que queríamos (...) ya que hemos bloqueado el proceso".

También se mostró satisfecho con que la Corte "no haya reconocido una disputa de larga duración" entre Rusia y Georgia, que mantenía en su demanda que Moscú había estado aplicando una política de limpieza étnica en Georgia desde los años noventa.

En agosto de 2008 y tras un conflicto armado entre Georgia y Rusia, Osetia del Sur y Abjasia proclamaron unilateralmente su independencia con el apoyo de Moscú.

En su demanda, presentada el 12 de agosto de 2008, Georgia argumentó que Moscú ha apoyado la limpieza étnica de ciudadanos georgianos por parte de las fuerzas separatistas en esas regiones, mediante el suministro de armas, el reclutamiento de mercenarios e incluso la intervención directa de sus tropas.