Los misiles Grad de las fuerzas gadafistas contuvieron el avance de los rebeldes hacia el oeste y lograron hacerles retroceder hasta Ras Lanuf, frustrando así su progresión hacia Sirte, bastión de los leales al líder libio, Muamar el Gadafi.

"Los rebeldes se han replegado a Ras Lanuf para cobijarse de los misiles Grad que están lanzando las fuerzas de Gadafi", anunció el portavoz de los revolucionarios Mohamed Kablan, que mantuvo contacto telefónico con algunos de los combatientes.

Pese a este retroceso de los sublevados, los partidarios del dirigente libio no se movieron del Valle Rojo, a unos 100 kilómetros al oeste de Ras Lanuf, desde donde estuvieron bombardeando durante el día las posiciones de los milicianos cerca de Ben Yauad, a medio camino entre ambos puntos.

A juicio de Kablan, en Ras Lanuf, los rebeldes "van a preparar sus defensas y van a esperar a que haya un bombardeo de la coalición internacional" contra las tropas gubernamentales.

A lo largo de esta jornada, el frente de guerra se había trasladado "justo al oeste de Ben Yauad", la localidad más occidental recuperada anteayer por los revolucionarios.

Así, cada vez parece más lejos Sirte, ciudad natal de Gadafi y clave para poder alcanzar Trípoli, la capital libia.