El Ejército francés atacó un puesto de mando del Ejército libio cerca de Trípoli dentro de las operaciones en el país norteafricano, informaron hoy fuentes del Estado mayor galo.

El mencionado centro de mando estaba situado a diez kilómetros al sur de la capital libia y el ataque se produjo anoche, añadieron las fuentes oficiales francesas.

Éstas añadieron que aviones galos atacaron lo que consideran un "importante" centro de mando del régimen de Muamar el Gadafi y que se está evaluando los daños causados en su infraestructura.

Así lo indicó el portavoz del Estado Mayor, coronel Thierry Burkhard, quien consideró "confidencial" la funcionalidad del centro de comando atacado.

El bombardeo de ese centro es la única operación ofensiva llevada a cabo por los aviones franceses en las últimas 24 horas, en las que se han producido diversas misiones de reconocimiento destinadas a mantener la zona de exclusión aérea sobre Libia.

El portavoz adjunto del Ministerio de Defensa, el general Philippe Pontiès, señaló que las operaciones galas se centran en la zona de Misrata, donde prosiguen los combates y "donde las fuerzas de Gadafi siguen atacando a la población".

Pontiès agregó además que el traspaso del mando de la operación a la OTAN se efectuará "de forma progresiva en las próximas 48 o 72 horas" y que "se pondrán en marcha los mecanismos necesarios para que todos los países puedan participar según sus intenciones".

En este sentido, el portavoz de Defensa destacó la importancia de la reunión prevista para el martes en Londres cuyo objetivo es definir "una dirección política" a la operación y para que cada país pueda participar de la forma que lo desee.

Indicó que se crearán los mecanismos para la participación de cada país, incluidos aquellos que no pertenecen a la OTAN, como es el caso de Catar y Emiratos Árabes Unidos, las dos naciones árabes que han aportado hasta ahora medios militares a la operación.

Burkhard indicó que prosiguieron las misiones conjuntas de aviones franceses y cataríes, una medida que justificó por las relaciones militares que mantienen ambos países.

En efecto, Catar ha aportado a la operación aviones Mirage de fabricación francesa y en los últimos años ha llevado a cabo misiones de formación de personal de ese país.

Ambos portavoces se negaron a evaluar el daño causado por el momento a las fuerzas de Gadafi, aunque Burkhard señaló que se han destruido sus defensas antiaéreas fijas.

"Creo que podemos decir que la zona de exclusión aérea está siendo mantenida", aseguró el militar, quien precisó que las defensas móviles "son más difíciles de neutralizar pero representan una amenaza menor" para los aviones aliados.