El gobernante Partido de la Conferencia Popular yemení instó ayer, domingo, a la formación de un nuevo Ejecutivo, que se encargue de la elaboración de una Constitución para cambiar el sistema político del país de presidencial a parlamentario.

Según un comunicado, divulgado tras una reunión de miembros del partido con su jefe, el presidente yemení, Ali Abdalá Saleh, el comité central del partido subrayó la importancia de acelerar la formación de un nuevo Gobierno.

Los reunidos aseguraron, asimismo, que trabajarán para llevar a cabo las iniciativas anunciadas últimamente por Saleh para garantizar un traspaso pacífico del poder.

Por su parte, Saleh instó a la formación de comités populares para colaborar con la Policía en el mantenimiento de la seguridad en las distintas zonas que aún siguen en conflicto.

Además, acusó a la oposición de "conspirar" para obligar a las autoridades a utilizar la fuerza contra los manifestantes.

Ayer, domingo, hombres armados opositores al Gobierno yemení tomaron una radio local, una fábrica de armas y varias sedes gubernamentales y de los cuerpos de seguridad en las ciudades de Zinyibar, Yaar y Yafe en la provincia de Abian, en el sur del Yemen, según informaron.

En Zinyibar, 40 kilómetros al este del puerto meridional de Adén, los hombres armados capturaron la sede de las autoridades locales, la oficina de los servicios secretos yemeníes y el edificio del organismo encargado de la lucha contra la malaria.

En la ciudad de Yaar, los asaltantes controlaron una fábrica de armas, el edificio de la radio local y la conocida como "Casa de los Huéspedes" que pertenece a las autoridades locales. Los testigos agregaron que los guardias de estos edificios habían abandonado sus puestos tras recibir advertencias de posibles ataques.

Presión al presidente

Saleh, presidente del Yemen desde la unificación del norte y el sur del país en 1990, aseguró que estos hombres armados pertenecen al grupo terrorista Al Qaeda.

El presidente yemení está siendo sometido a una fuerte presión política de la oposición, que exige su renuncia.

En una entrevista difundida ayer por la página web del canal de televisión emiratí Al Arabiya, Saleh aseguró que no tiene ningún problema en renunciar el poder siempre que sea por medios pacíficos.

Las protestas en Yemen, que se han saldado con decenas de muertos, comenzaron el pasado 27 de enero, al calor de las revueltas de Túnez y Egipto.