Un preso de 32 años que se hallaba recluido en la cárcel de Topas (Salamanca) ha aparecido muerto en la celda que ocupaba sin que hasta el momento se conozcan las causas del fallecimiento, aunque las primeras investigaciones apuntan a una probable sobredosis de medicamentos.

El preso, según ha explicado hoy la directora del centro penitenciario, Concepción Zurdo San Segundo, durante su participación en un acto en la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA), fue encontrado sin vida el pasado domingo por la mañana.

No obstante, Zurdo ha evitado ofrecer más información debido a que "están abiertas unas diligencias judiciales" por lo que, según ha sostenido, "entorpecería la investigación judicial que se está llevando a cabo".

Por su parte, el presidente del sindicato Acaip, José Manuel Salvador, en declaraciones a Efe, ha aseverado que, al parecer, las investigaciones sobre la muerte del preso, que desde hace dos meses se encontraba en Topas a donde llegó procedente de Canarias, se dirigen hacia una sobredosis de medicamentos.

A su juicio, ese traslado a Topas no es el único, ya que, según ha señalado, "suele ser frecuente que lleguen internos en su mayoría conflictivos y con problemas, para reducir la masificación de las penitenciarias canarias".

Salvador ha vuelto ha insistir en la falta de personal que acusa la cárcel salmantina respecto a la población reclusa, aunque ha reconocido que en los últimos meses se ha reducido, pero aún así, según ha concluido, la capacidad de Topas "está sobredimensionada en más de 500 presos".