"Si quieren evitar que esta idea salga adelante tendrán que ir contra la Ley de Asociaciones, no contra los empresarios". Con estas palabras, el presidente de la Federación Canaria de Empresarios del Ocio (Fecao), José Santana, mostraba ayer su confianza en la medida que ha ideado para permitir que "los clientes que lo deseen puedan fumar en los locales".

"Hemos seguido el modelo de la Iglesia, es decir, hemos creado el Club Ocio con Humo que tiene su sede principal en Las Palmas de Gran Canaria, pero que puede tener cuantas sedes quieran abrir sus socios. ¿Acaso sólo se puede dar misa en El Vaticano? No, también en todas las demás iglesias y parroquias, pues esto es lo mismo. Quien quiera pertenecer a este club tiene que aceptar unos estatutos y en ellos se contempla que los socios podrán fumar, a partir de ahí se pueden abrir tantas sedes del club como los socios quieran", explica Santana.

Pero, ¿cómo se trasladará esto a los locales de ocio? "Realmente a lo único que se nos podría obligar es a que la sede del club tendría que tener una sistema de aire independiente al del resto del local, lo cual tampoco es demasiado complicado porque bastaría con dividir el espacio o ampliarlo. De esta manera, el cliente se pediría lo que desea consumir y tendría que trasladarse hacia la otra parte del local si quiere tomárselo mientras fuma".

Y es que otra de las prohibiciones que establece la ley de asociaciones es que en las asociaciones no está permitida la venta. "Eso tampoco es así del todo, porque, por ejemplo, está permitida la instalación de máquinas expendedoras, pero para este caso en poco o nada afecta porque serían zonas independientes de un mismo local, pero conectadas".

La idea está muy bien vista por los hosteleros, hasta el punto que en poco más de 15 días ya han sido más de un centenar los empresarios que se han hecho socios de esta organización.

"Esto no es ningún disparate. Para dar el paso y crear el Club hemos pedido informes jurídicos y han sido todos positivos, haciendo hincapié en que la Ley de Asociaciones nos permite hacerlo sin que suponga una vulneración de la nueva Ley Antitabaco", insiste Santana, quien informa de que la creación del Club ya ha sido dada a conocer al viceconsejero de Turismo, Ricardo Fernández de la Puente, que según Santana "acogió la idea de muy buen grado".

También se le ha comunicado a varias áreas del Gobierno de Canarias y a la Consejería de Sanidad, que según Santana "son los que tienen que dar el visto bueno y lo harán, porque no les queda otra con la ley en la mano".

La idea ha comenzado a tener tal repercusión que las organizaciones empresariales de otros lugares ya han comenzado a copiarlas, como es el caso de Baleares, donde ya trabajan en constituir un club.

Y es que las llamadas a la insumisión realizadas por algunos empresarios peninsulares aludiendo a las "enormes pérdidas" que la ley antitabaco les estaba causando no han tenido eco entre sus compañeros, quizás por que la multa -que ronda entre los 600 y los 600.000 euros- no es asumible para casi ninguno de ellos.