El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, rechazó ayer la posibilidad de presentar su dimisión como pide la oposición tras el escándalo desatado por el caso Ruby R, la joven marroquí que acudió a sus fiestas cuando era menor de edad.

A su llegada a la Cámara de los Diputados ayer para mantener una reunión con los abogados y parlamentarios de su partido, el primer ministro fue preguntado por los periodistas sobre si tenía intención de dimitir ante el gran escándalo político que vive Italia estos días.

"¿Dimitir?, ¿pero estáis locos?", contestó Berlusconi.

El mandatario aseguró además que está divirtiéndose y que está "sereno" ante todas las filtraciones sobre la investigación que está publicando la prensa desde el pasado viernes, día en el que se supo de su condición de indagado por concusión e incitación a la prostitución de menores por el caso Ruby R.

Diputados del partido de Berlusconi, el Pueblo de la Libertad (PDL), y los abogados y diputados del mandatario Niccolò Ghedini y Gaetano Pecorella convocaron ayer una reunión en la sede de la Cámara de los Diputados para abordar las posibles implicaciones que puede traer esta investigación.

Nuevos registros

Y es que la Junta para las Autorizaciones de la Cámara empieza hoy a debatir la solicitud enviada el pasado lunes por la Fiscalía de Milán para proceder a nuevos registros policiales, esta vez en la oficina del contable del primer ministro, lugar que goza de inmunidad parlamentaria dado que está considerada como parte de la secretaría política del diputado Berlusconi.

También ayer, el primer ministro acudió a la sede de la Presidencia de la República, el Palacio del Quirinal, donde se reunió con el jefe del Estado, Giorgio Napolitano, con motivo de los actos de organización del 150 aniversario de la unificación de Italia, que se conmemora este 2011.

Berlusconi no quiso dar detalles de si habló con Napolitano del escándalo Ruby, después de que el presidente de la República pidiera ayer en un comunicado que se aclarara en los tribunales todo el asunto ante la "turbación" que acusa el país por los continuos detalles que van haciéndose públicos sobre la investigación.

La Fiscalía de Milán envió el viernes a Berlusconi una invitación para comparecer entre los días 22 y 24 de enero para dar explicaciones sobre las hipótesis de delito bajo las que se le investiga.