El alcalde de Lleida, Àngel Ros, ha remarcado hoy que en los procesos de integración de los inmigrantes "no todo vale", de manera que, a su entender, las aportaciones culturales se deben frenar cuando vulneran algunos valores determinados, como la igualdad y la tolerancia.

Según un comunicado de Rac1, en declaraciones a esta emisora, Ros se ha referido a la decisión del TSJC que ha ordenado la suspensión cautelar de la prohibición del burka en los edificios públicos de Lleida, que entró en vigor el pasado 9 de diciembre.

"Como toda sentencia judicial, la debemos respetar, pero es una suspensión cautelar. De aquí a unos meses habrá una sentencia definitiva. Pero creemos que no era necesaria la suspensión porque la aplicación de la prohibición no puede generar daños de difícil compensación, como señala el auto", ha dicho el alcalde.

Para Ros, con esta prohibición no se está vulnerando ningún derecho fundamental, como alega la asociación cultural musulmana Watani, que fue la que interpuso un recurso contencioso-administrativo contra la prohibición y pidió que se suspendiera cautelarmente su ejecución, hasta que se resuelva el recurso.

"Lo que vulnera los derechos fundamentales es el uso de determinadas prendas de ropa, que impiden la identificación de todo el mundo, no sólo de las mujeres", ha dicho Ros.

"Abordamos el tema del burka como una señal de que en los procesos de integración no todo se vale. Las aportaciones culturales se deben frenar cuando vulneran algunos valores determinados. Y el valor igualdad y tolerancia son básicos", ha remarcado el alcalde.

Ros ha explicado, por otro lado, que en Lleida se ven burkas y niqabs, dos modalidades del velo islámico, y que pese a ello desde la entrada en vigor de la prohibición no ha habido ninguna vulneración de la ordenanza.

"Estoy convencido de que el TSJC, al final, convalidará esta ordenanza", ha asegurado Àngel Ros.