¿SABÍAN QUE Portugal fue el primer país del mundo en delimitar una zona vitícola? Podríamos afirmar que dieron el primer paso para definir lo que hoy conocemos como denominaciones de origen y fue con la región del Duero, en 1756. En la actualidad, el país luso cuenta con 40 regiones vitivinícolas, de las cuales algunas ya destacaban en el siglo XIX. Todo ello nos da una idea de la fascinante variedad de vinos que existe en el país con más de 300.000 hectáreas de viñedos, ocupando la séptima posición mundial tras España 1.2 millones de hectáreas, Francia 914.000, Italia 908.000, Turquía 530.000, Estados Unidos 415.000 o China 326.000. Europa, en términos globales representa el 63% del viñedo mundial.

Siguiendo la normativa comunitaria, los vinos portugueses se clasifican según las siguientes designaciones;

VCPRD-Vinho de Qualidade Produzido em Região Determinada (VQPRD), producidos a partir de variedades de uva autorizadas y limitando sus rendimientos.

En esta clasificación se engloban los vinos de las DOC-Denominação de Origem Controlada-, y los IPR (Indicación de Proveniencia Reglamentada)-Indicação de Proveniência Regulamentada-.

Además existen los Vinos regionales (Vinhos Regionais), equivalentes a los vinos de la tierra españoles y los vinos de mesa que no determinan su origen.

Uno de los más conocidos del país es el vinho verde, elaborado en la provincia de Minho (noreste de Portugal), es el área con DOC más extensa de Portugal (70.000 hectáreas). Se utiliza muchísimo la técnica del cultivo en pérgola y podremos encontrar tintos y sobre todo blancos, Son vinos con buena acidez y con restos de carbónico de la fermentación. No se trata de vinos para meditar, se consideran unos vinos frescos para abrir el apetito.

Continuaremos con el recorrido por las principales regiones vitícolas portuguesas; Tras-os-Montés, Beiras, Estremadura, Ribatejo, Terras do Sado, Alentejo, o Algarve.

Hasta la próxima semana, ¡salud!