El Gobierno de Filipinas celebró hoy el fallo de un juez estadounidense que aprobó el reparto de una indemnización de 7,5 millones de dólares para miles de víctimas de la dictadura de Ferdinand Marcos.

La portavoz presidencial filipina, Abigail Valte, manifestó que "ya era hora" de que reciban una compensación quienes sufrieron violaciones de los derechos humanos como secuestros, asesinatos y torturas durante los 21 años que gobernó Marcos.

Un tribunal de Honolulu (Hawai) autorizó ayer repartir el dinero entre las 7.526 personas que en 1986 presentaron una demanda contra el ex presidente filipino, después de que fue derrocado por una revolución popular apoyada por los militares.

La sentencia fue pronunciada en el lugar al que Marcos huyó al exilio y donde murió tres años mas tarde, y la suma fue recaudada a tres empresas estadounidenses vinculadas a la familia del dictador.

Ferdinand Marcos gobernó Filipinas con puño de hierro entre 1965 y 1986, incluidos ocho años bajo la ley marcial, periodo en el que acumuló de manera ilícita unos 10.000 millones de dólares, aunque sólo se ha podido probar judicialmente el origen irregular de menos del diez por ciento de esa cantidad.