El coordinador federal de (IU), Cayo Lara, achaca el anuncio de los sindicatos de no convocar en enero una huelga general a la apertura de un "nuevo proceso de negociación y conversación" abierto por el Gobierno.

En declaraciones a los periodistas, el dirigente de IU cree que los sindicatos también esperan que el Gobierno "esté dispuesto a corregir las políticas negativas que está haciendo hasta este momento".

Lara ha dicho esperar "que no se pretenda tapar con una cortina de humo el objetivo del Gobierno de aumentar la edad de jubilación a los 67 años" y ha recordado que la pretensión del Ejecutivo reside en "recortar" las pensiones a "futuros pensionistas" y "alimentar los fondos privados", aludiendo al "beneficio" de la banca.

Ha manifestado que la postura de la formación que coordina sobre el posible aumento de la edad de jubilación hasta los 67 años es una "raya roja" en la que "no hay una razón objetiva" para que se ejecute.

El líder de IU ha defendido que en España hay un "superávit" en la Seguridad Social y que en una coyuntura de crisis, con el volumen de parados existente, "no es de recibo que se esté planteando", al mismo tiempo que recomienda "esperar hasta que pase la crisis" para "hablar" del sistema de pensiones.

Lara, quien considera que el Gobierno "está intentando claudicar" ante los "poderes económicos y ante Bruselas", se ha mostrado cauto sobre el proceso de negociación en desarrollo y adelanta que "hay que esperar" a su evolución para "valorarlo".

Ha afirmado que su formación "no estaría en contra" de un posible Pacto de Estado sobre las pensiones aunque matiza que dependería de "cómo se haga" y ha dicho que resulta indispensable "no tocar" los 65 años estipulados en la edad de jubilación máxima y que tampoco se "toque" el periodo de cálculo para no "dar un palo" a los pensionistas.

Lara, que hoy se ha reunido en Córdoba con el alcalde de la capital, Andrés Ocaña, y con el coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, para "programar la precampaña electoral", se ha mostrado confiado en "renovar" el gobierno en Córdoba tras los próximos comicios municipales.