La Policía Nacional ha intervenido en Barcelona medio kilo de cocaína de gran pureza camuflada en el mango de punzones metálicos y ha detenido a una persona que importaba la droga desde Sudamérica, según han informado fuentes policiales.

La complejidad del método de ocultación empleado hizo necesaria la colaboración de un metalista para descubrir el escondite empleado por los narcotraficantes.

El detenido importaba la droga desde Sudamérica, la cortaba y adulteraba en su domicilio y, posteriormente, se distribuía a consumidores de diferentes localidades del Maresme.

La operación se inició tras las informaciones recibidas en la comisaría de Mataró sobre un individuo que se dedicaba al tráfico de drogas en el Maresme.

El presunto narcotraficante fue detenido en la ciudad de Barcelona y, en ese momento, llevaba en una caja de cartón de pequeñas dimensiones que contenía diez punzones de acero inoxidable, aparentemente macizos, de los empleados en carpintería de la madera.

Ante la incongruencia de sus contradictorias manifestaciones sobre el origen, destino y propiedad de las herramientas, fue trasladado a comisaría, donde una vez abiertas las empuñaduras se localizó la cocaína.

En el registro de su domicilio en Arenys de Mar, la policía intervino básculas digitales de precisión, diferentes tipos de percusores para el corte de la droga y dinero en efectivo. El detenido ingresó en prisión tras pasar a disposición judicial.