El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, ha garantizado hoy que el Estado de derecho tiene mecanismos para impedir que quienes amparan la violencia estén en las instituciones y ha subrayado que la democracia tiene que ser "intolerante con los intolerantes".

Tras inaugurar unas jornadas sobre el expediente judicial electrónico, Caamaño ha recordado que las Cortes Generales acaban de aprobar una reforma de la Ley de Régimen Electoral General cuyo cometido es precisamente impedir que quienes amparan la violencia estén en los órganos democráticos del Estado, que se prevé que esté en vigor antes de las elecciones locales.

No obstante, ha explicado que la Ley de Partidos tiene previstos los mecanismos jurídicos necesarios para que antes de que puedan presentarse candidaturas se proceda a no registrar y a impugnar unos estatutos que no se ajusten a la legislación ni a la Constitución.

Estos mecanismos -ha indicado- han sido refrendados por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) y respetan los derechos fundamentales.

Una democracia es un espacio de convivencia que tiene que ser tolerante pero que "ha de ser intolerante con los intolerantes", ha dicho Caamaño.

Esto es "constitucionalmente legítimo" y por eso ha concluido: "no somos los demócratas quienes tenemos que mover pieza ni cambiar nuestra posición".