Las autoridades de Río de Janeiro elevaron hoy a 37 la cifra de muertos causados por las lluvias en ese estado brasileño, aunque algunos medios informaron de al menos 44, mientras que otros 13 se registraron en Sao Paulo el martes.

El temporal en Río de Janeiro comenzó el martes por la noche y afectó en particular a la región serrana, donde al menos cuatro ciudades han sido declaradas en alerta debido a corrimientos de tierra que han sepultado un número indeterminado de viviendas.

La situación más crítica se vivía en Teresópolis, una ciudad situada en montañas cercanas a Río de Janeiro, donde el número de fallecidos confirmados se situaba ya en 32, aunque se teme que aumente a medida que avancen las tareas de rescate.

Asimismo, el departamento de Defensa Civil consideró "grave" la situación en las localidades de Nova Friburgo e Itaipava, vecinas a Teresópolis, en las que se han registrado al menos cinco muertos.

Las autoridades admitieron que se trata solo de "balances parciales", que sólo podrán ser completados una vez que acaben las labores de los equipos de rescate.

Según cifras manejadas por algunos medios locales, no confirmadas aún en forma oficial, los muertos ya serían más de 44 en las localidades afectadas por las precipitaciones.

El vicegobernador del estado de Río de Janeiro, Luiz Fernando Pezao, se desplazó a algunas de las zonas afectadas por las lluvias y, en declaraciones a la radio CBN, calificó de "desesperanzador" el panorama que observó desde un helicóptero.

"Quien se encuentre en un lugar seguro que intente no salir a la calle", dijo Pezao, quien consideró lo ocurrido como una "verdadera calamidad".

En varias ciudades de la región serrana de Río de Janeiro la situación se agravó por la falta de energía eléctrica y otros servicios básicos, como el abastecimiento de agua potable, que fueron interrumpidos por daños causados por el temporal.

Las lluvias que caen sobre Río de Janeiro siguen a las registrados el martes en el vecino estado de Sao Paulo, donde al menos 13 personas murieron debido a inundaciones o deslizamientos de tierra.

La mayor preocupación de las autoridades paulistanas se centraba en la localidad de Franco da Rocha, en la región metropolitana de Sao Paulo y cuyo caso urbano permanecía por completo bajo las aguas.

Tanto en Río de Janeiro como en Sao Paulo, las autoridades de Defensa Civil han comenzado a preparar diversos cargamentos de ayuda humanitaria que serán distribuidos en las regiones en situación más crítica, una vez que las condiciones del clima lo permitan.