La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), que reúne a más de 3.000 profesionales, ha defendido hoy la financiación de los tratamientos para la deshabituación del tabaquismo como "una medida necesaria" para las personas fumadoras con patología respiratoria o cardiovascular.

Los neumólogos han esgrimido que "no se puede bajar la guardia" pese a la entrada en vigor de la nueva Ley Antitabaco, porque el consumo de cigarrillos debe de ser tratado como "una enfermedad adictiva y no como un mal hábito".

Por eso, han calificado de "prioritario" plantear una financiación "concreta y común" en todas las Comunidades Autónomas de los tratamientos que han demostrado ser "eficaces", en línea con las últimas declaraciones de la ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín.

El doctor Carlos Jiménez, coordinador del Área de tabaquismo de SEPAR, ha esgrimido que la financiación de los fármacos contra el tabaquismo es "tan necesaria como la de los tratamientos de cualquier otra enfermedad crónica".

El neumólogo José Antonio Riesco, vicepresidente de SEPAR, ha explicado que es importante "empezar ya al menos a financiar el tratamiento de los pacientes crónicos respiratorios o cardiovasculares".

"Hay enfermos de patología respiratoria a los que se les financia un tratamiento, como por ejemplo broncodilatadores, y aunque se les ha recomendado dejar de fumar siguen haciéndolo aun sabiendo que la eficacia es menor", ha relatado.

El resultado es una situación "contradictoria" en la que por un lado se está manteniendo el gasto en un recurso, mientras por el otro "se está recortando una medida que va a traer una rentabilidad a corto o medio plazo".

En cuanto a los costes de la financiación de los tratamientos de deshabituación, la experiencia de SEPAR a través de las Unidades de Tabaquismo de diferentes centros de salud rebaja de forma "considerable" las cifras que se están manejando.

"En España es cierto que existen 11 millones de fumadores pero sólo el 30% de ellos está dispuesto a iniciar un intento serio para dejar de fumar", ha puntualizado Jiménez.

La práctica clínica diaria permite constatar que el gasto en fármacos de cada fumador que acude a una unidad de tabaquismo es de alrededor de 125 euros.

Según el doctor, si los 3,3 millones de españoles que quieren dejar de fumar iniciaran un tratamiento, el coste en fármacos seria de alrededor de 400 millones de euros.

Jiménez ha calificado de "asumible" este gasto si se tiene en cuenta el ahorro que puede conllevar, ya que frente a los 125 euros de una terapia farmacológica de deshabituación tabáquica se sitúan, por ejemplo, los 12.000 que puede costar el tratamiento de un cáncer de pulmón cuyo origen es el tabaco.

Tras los diez primeros días de la entrada en vigor de la nueva Ley para la Prevención y el Control del Tabaquismo, los profesionales de la salud respiratoria han mostrado su satisfacción por los avances conseguidos y han recordado que las consecuencias sanitarias de este hábito son "un problema grave de salud pública".

Asimismo, han reiterado el compromiso de los especialistas de proporcionar ayuda sanitaria a todos los fumadores que deseen abandonar el tabaco y, muy especialmente, a los que padecen patologías respiratorias.