La ministra de Defensa, Carme Chacón, ha visitado este martes el Cuartel General de la Fuerza Terrestre (Futer), ubicado en la antigua Capitanía General de Sevilla, y durante su visita ha destacado que la tecnología y la formación son "vitales" para la seguridad y protección "de nuestros militares en todas sus operaciones", añadiendo que, "gracias al Futer, nuestros hombres y mujeres de uniforme están mejor preparados para responder a las amenazas, mejor informados de los riesgos y mejor protegidos del fuego amigo".

La ministra de Defensa ha llegado en torno a las 10.45 horas de este martes al Cuartel General de la Fuerza Terrestre, donde ha sido recibida por un piquete de honor. Asimismo, durante su visita al cuartel ha estado acompañada por el jefe de Estado Mayor del Ejército (JEME), Fulgencio Coll; el jefe de la Fuerza Terrestre, Virgilio Sañudo, y el jefe de Estado Mayor de la Fuerza Terrestre, Juan Manuel García Montaño.

Durante su visita, la ministra ha conocido de primera mano el funcionamiento del nuevo sistema de entrenamiento y adiestramiento para tripulaciones y unidades blindadas denominado ''Steal Beast'' y otro sistema de seguimiento, llamado ''Friendly Force Tracking (FTT)'', que comienza a implantarse en las misiones internacionales de las tropas españolas y que permite conocer en tiempo real la situación de las unidades, así como difundir alarmas y amenazas.

En la sala denominada ''Centro de Situación'', dotada con los últimos avances tecnológicos y Puesto de Mando de la Futer, el jefe de la Fuerza Terrestre, Teniente General, Virgilio Sañudo, ha realizado una demostración del funcionamiento de ambos sistemas, que permiten "mejores" decisiones en el tiempo "oportuno" y una mayor coordinación. Así, la ministra ha podido observar, en tiempo real, una simulación sobre una patrulla del contingente español en la ruta Lithium en Afganistán.

El Cuartel General es el responsable de la preparación y generación de todos los contingentes que se despliegan en operaciones, como Líbano y Afganistan, y de la preparación y certificación de otros contingentes que forman parte de compromisos nacionales e internacionales, como el componente terrestre de la Fuerza Conjunta de Reacción Rápida, el ''Battle Group'' de la Unión Europea o las Fuerzas de Respuesta asignadas a la OTAN según las rotaciones asignadas a España.

MISIONES "DE UNA ENORME VARIEDAD Y COMPLEJIDAD"

En total, ha señalado la ministra durante su breve alocución, "son más de 45.000 hombres y mujeres a los que se les confían misiones de una enorme variedad y complejidad". "Pueden patrullar la línea azul entre Líbano e Israel, pueden escoltar a los equipos de instrucción del Ejército afgano en la provincia de Badghis, pueden participar en la Fuerza Conjunta de Reacción Rápida, en los Battlegroups de la Unión Europea o en las Fuerzas de Respuesta de la OTAN", ha agregado.

Unos cometidos que, según sus palabras, cumplen con "una eficacia, una entrega y una profesionalidad que distingue a nuestras Fuerzas Armadas allí donde actúan, y que multiplica el prestigio de España en el mundo". Desde el año 2002, la Fuerza Terrestre engloba a todas las unidades operativas del Ejército de Tierra (excepto las de Canarias) con el objetivo de concentrar en un único mando la preparación de la Fuerza y la generación de estructuras operativas.

Su cometido principal es el de prepararse para constituir, de forma rápida y eficaz, unidades operativas terrestres para la realización de operaciones militares. En este sentido, Chacón ha señalado que "desde su creación, la Fuerza Terrestre ha desempeñado un papel esencial en la unificación de los criterios para la formación y adiestramiento de nuestros militares", al tiempo que ha destacado el "gran trabajo" desplegado por la Futer y les ha animado a continuar "con tan alto y óptimo esfuerzo".

TRES "GRANDES" PREOCUPACIONES

De su lado, el jefe de la Fuerza Terrestre, Virgilio Sañudo, que ha intervenido con anterioridad a la ministra, ha puesto de manifiesto la existencia de tres "grandes" preocupaciones, como son "generar el soldado correcto para las operaciones en las que estamos empeñados, es decir, buscar a los mejores; que el soldado tenga el equipo y el material necesarios en las mejores condiciones para la operación que va a realizar y que se lleve a cabo una preparación específica, rigurosa y exigente para alcanzar el éxito en la misión que vamos a desarrollar".

Al hilo de ello, Sañudo ha aseverado que a una zona de operaciones "no se va a aprender, sino a responder bien desde el primer día", y ha añadido que "fracasar en la preparación es el primer paso para fracasar en la operación". "Quiero que mis soldados, cuadros de mando y tropas, estén física, táctica, técnica y moralmente aptos, y quiero que estén bien mandados, que haya lideres entre mis cuadros de mando", ha concluido.