Corea del Sur y Japón acordaron hoy seguir avanzando para firmar el primer acuerdo de cooperación militar entre los dos países, cuyas relaciones están aún condicionadas por los recuerdos de represiva ocupación nipona de Península de Corea en la primera mitad del siglo XX.

El titular de Defensa surcoreano, Kim Kwan-jin, y su homólogo japonés, Toshimi Kitazawa, se reunieron hoy en Seúl con la intención de avanzar en un acuerdo para que ambos Ejércitos intercambien material militar en operaciones en tiempo de paz e información secreta.

Según informaron fuentes del Gobierno surcoreano a la agencia local Yonhap, los dos ministros "acordaron mantener consultas específicas" para firmar el acuerdo de intercambio de material militar y servicios en operaciones en tiempo de paz, aunque no se han fijado fechas ni plazos.

También habrá futuras consultas para firmar otro pacto, el "Acuerdo General de Seguridad de Información Militar" (GSOMIA, en sus siglas en inglés), que facilite el intercambio de información militar secreta, especialmente la relacionada con Corea del Norte.

Este tipo de acuerdos de cooperación son vistos con suspicacias en Corea del Sur, ya que Japón ocupó de manera brutal el país desde 1910 hasta el fin de la II Guerra Mundial, en 1945.

En la reunión, la primera entre los ministros de Defensa de ambos países en dos años, Seúl y Tokio se comprometieron a explorar métodos de cooperación militar más cercana para responder a las provocaciones de Pyongyang.

Particularmente, indicaron, tras el ataque norcoreano con obuses a la isla surcoreana de Yeonpyeong el pasado 23 de noviembre, que causó cuatro muertos en el Sur, así como por las revelaciones sobre el programa de enriquecimiento de uranio del régimen de Kim Jong-il.

En el comunicado conjunto divulgado tras la reunión, Kim y Kitazawa acordaron "una coordinación cercana" para responder conjuntamente a las recientes provocaciones norcoreanas, que "no pueden ser aceptadas".