El dirigente del Colectivo de Víctimas del Terrorismo en el País Vasco (Covite) Rubén Múgica ha mostrado su preocupación porque se visualice un hipotético fin de la banda terrorista ETA como una "suerte de empate entre el crimen organizado que representa ETA y el Estado democrático que es la España constitucional que nació en el 78", y además ha afirmado que la posición de los ocho jugadores de la Real Sociedad a favor de los presos de ETA es "una muestra más de lo cómodo que resulta en el País Vasco estar cerquita de los criminales".

En declaraciones a la Cadena Cope recogidas por Europa Press, Múgica ha asegurado que el común de las víctimas está "en estado de alerta" ante cómo vaya a representarse un hipotético fin del terrorismo de ETA. "Nos preocupa que alguien quiera que la visualización sea distinta de la derrota de ETA y se visualice una suerte de empate, de entendimiento camuflado entre un gobierno y una organización criminal como ETA", ha aseverado Múgica.

El hijo de Fernando Múgica, ex dirigente del PSE asesinado por ETA, ha argumentado ese estado de alarma en que se encuentran las víctimas del terrorismo aludiendo al proceso de paz de 2005, 2006 y 2007. "Recordamos lo que fue el último embuste llamado pomposamente proceso de paz, donde incluso el Gobierno cayó en el lenguaje aquel de llamar hombres de paz a los criminales o llamar accidentes a los asesinatos e incluso Zapatero se permitió el lujo de insinuar que las víctimas del terrorismo éramos personas vengativas y rencorosa que no queríamos la paz", ha declarado.

Respecto a la manifestación convocada para mañana en Bilbao en favor de los presos de ETA, el hijo del ex dirigente del PSE asesinado por ETA Fernando Múgica, ha reafirmado la insistencia de Covite para que la Audiencia Nacional prohíba dicho acto, "que como todas las manifestaciones a favor de presos etarras se acaba convirtiendo en actos de enaltecimiento de sus actos criminales".

Además, Múgica ha asegurado que la adhesión pública de ocho jugadores de la primera plantilla de la Real Sociedad a esta manifestación supone "una muestra más de lo cómodo que resulta en el País Vasco estar cerquita de los criminales y lo muy incómodo que es estar al lado de las víctimas del terrorismo".

Por último, Múgica ha querido lanzar a esos ocho jugadores una pregunta: "¿Dónde estaban esos jugadores cuando ETA asesinó en el 93 a José Antonio Santamaría, que fue jugador de la Real Sociedad, cuando ETA asesinó en el 95 al socio de la Real Sociedad Gregorio Ordóñez o cuando en el 96 asesinó al socio de la Real Sociedad Fernando Múgica? "¿Dónde han estado estos 8 jugadores cada vez que ETA ha cometido uno de sus asesinatos o cuándo en el País Vasco día a día durante años se ha perseguido a las personas que no somos nacionalistas vascos?".