El Ejecutivo "va a pelear" por alcanzar un acuerdo sobre la reforma de las pensiones con los sindicatos, así como con los empresarios y los partidos políticos. Así lo manifestó el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, que añadió que "voluntad no va a faltar". En la reunión que mantuvieron este viernes el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, con los secretarios generales de CC.OO. y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, para hablar sobre pensiones y negociación colectiva. El dirigente de CC.OO. recalcó que se trataba simplemente de una reunión de trabajo y que no sería decisiva, pues, con esa cita se inauguró una negociación que calificó de "permanente" y que dijo "podría prolongarse" durante el fin de semana.

El Gobierno acudía al encuentro de este viernes con el ánimo de lograr el mayor consenso posible, según ha asegurado Rubalcaba en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. "Ya veremos lo que da de sí", señalaba.

El vicepresidente primero no quiso, sin embargo, desvelar si el Ejecutivo pondría sobre la mesa nuevas propuestas que faciliten ese consenso ante el rechazo de los sindicatos a ampliar la edad legal de jubilación a los 67 años.

Hasta la fecha, ha dicho en respuesta, el Gobierno ha puesto sobre la mesa una serie de medidas que pretenden garantizar que el sistema de pensiones siga siendo sólido dentro de veinte o treinta años, para que los futuros pensionistas puedan cobrar su pensión.

Desde CC.OO aseguraron mediante una nota de prensa que, debido a que se trata de una negociación de carácter permanente, los resultados de la misma se conocerían una vez concluyera. Los asuntos a tratar en el encuentro de este viernes fueron la reforma de las pensiones, la reforma laboral y la estructura de la negociación colectiva.

La intención de los sindicatos es la de "alcanzar un acuerdo" cuanto antes y creen que si esto no ocurre "será responsabilidad del presidente del Gobierno".

El diálogo social no se encuentra en su mejor momento desde que el Ejecutivo decidió seguir adelante con una reforma laboral que los sindicatos rechazaban de manera tajante y que provocó una huelga general el pasado 29 de septiembre. Sin embargo, con la reforma de pensiones a la vista, ambas partes han retomado contacto.

NO AFECTA A "LOS PENSIONISTAS ACTUALES"

"Esto no tiene que ver con los pensionistas actuales. Esta reforma es para quienes hoy tienen 30 ó 40 años. El objetivo es garantizar las pensiones de dentro de 10, 20, 30, 40 años", insistió Rubalcaba para añadir que no sólo en España se está revisando el sistema de pensiones, también en otros países.

La razón, según explicó el ministro de Interior, es que la esperanza de vida se ha incrementado notablemente desde que se diseñó el sistema, pues antes la gente vivía cinco, seis, siete años después de jubilarse y ahora pueden llegar a vivir incluso veinte años más.

Al mismo tiempo, la tasa de natalidad ya no es la misma que entonces, es mucho más baja, y para recordarlo, el vicepresidente primero puso como ejemplo "a la familia de Pepe Blanco", cuyo abuelo tuvo ocho hijos, frente al único hijo que tuvo su padre.

"Hay que hacer cambios en el sistema para conseguir que los pensionistas de futuro tengan las mismas garantías que los pensionistas actuales. Yo confío en que en ese espíritu de que hay que hacer reformas y cambios haya una base racional para empezar a hablar. Voluntad no va a faltar. Hay que hacer cosas porque si no, no salen los números", ha concluido.

FECHA TOPE: 28 DE ENERO

El Gobierno ha establecido como fecha tope para aprobar la reforma de pensiones el 28 de enero. En todo caso, la reforma irá como anteproyecto de ley al Consejo de Ministros y no como ''decretazo'', según ha indicado el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez.

De momento, las conversaciones que han mantenido ambas partes no se han traducido en avances significativos, más que nada porque el Gobierno sigue en su idea de retrasar la edad de jubilación de manera obligatoria a los 67 años, medida que tiene el rechazo frontal de las centrales sindicales, que consideran esto una "línea roja" que no puede traspasarse si se quiere evitar una nueva huelga general en España.

Por si acaso, los sindicatos han convocado sus respectivos Consejos Confederales para la próxima semana. UGT reunirá al suyo el próximo lunes, 10 de enero, mientras que CC.OO. lo hará el martes. Allí analizarán el resultado de las últimas negociaciones con el Gobierno y cuáles son los próximos pasos que seguirán, sin descartar la huelga en caso de ver imposible el acuerdo.

El Gobierno, por su parte, lleva días defendiendo la necesidad de retrasar la edad de jubilación a los 67 años y ha insistido, por boca del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y del ministro de Trabajo, en que esta medida se aplicará de forma progresiva, en un plazo de entre 16 y 18 años, sin afectar a los actuales pensionistas.

El Ejecutivo también sostiene que su intención es negociar con los sindicatos hasta apurar el plazo del 28 de enero, porque su idea es lograr el mayor consenso social posible y también parlamentario. De momento, no ha encontrado ni en unos ni en otros grandes apoyos para alargar la edad legal de jubilación a los 67 años.