El primer ministro de Hungría, el conservador Viktor Orban, aseguró que no se modificará la polémica ley de medios que ha suscitado críticas en toda Europa.

"Ni (siquiera) lo consideramos", respondió Orban al ser preguntado sobre si habrá cambios en la ley, según sus declaraciones a la cadena de noticias "hirtv" que publica hoy la prensa local.

El primer ministro húngaro adujo que todos los puntos de la ley están presentes en la legislación de medios de países europeos.

Con estas declaraciones el primer ministro conservador contradijo al presidente del grupo parlamentario del partido gubernamental Fidesz, János Lázár, que ayer había asegurado que "si el asunto no funciona tendrá que ser corregido", en referencia a un código que ha levantado críticas en toda Europa por sus posibles restricciones a la libertad de prensa.

La canciller alemana, Angela Merkel, la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), así como los partidos de la oposición húngara se han pronunciado contra de una legislación que da amplios poderes a una entidad de nueva creación para controlar televisiones privadas, emisoras de radio, periódicos y portales de internet.

La ley, aprobada el miércoles y que entrará en vigor el 1 de enero, establece la centralización de los informativos de las tres cadenas públicas y crea el denominado Consejo de prensa, que supervisará la información.

Este consejo cuenta con facultades para multar a los diarios y a los portales digitales, en el caso de agravio a la moral pública, o cualquier minoría o mayoría, algo también criticado, ya que la ley no determina de una forma exacta estos conceptos.

La ley está pendiente de ratificación por el presidente de la república y los opositores socialdemócratas han anunciado ya que, en el caso que eso suceda, remitirán la ley al Tribunal Constitucional.