La Asociación Profesional de Controladores Aéreos (Apcae) critica a la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) por "extralimitarse en sus funciones, al obligar a los controladores aéreos, bajo las amenazas de multas y despido, a presentarse al examen de inglés a partir de este mes".

En marzo de 2011, todos los pilotos y los controladores deberán acreditar un determinado nivel de inglés para poder operar o gestionar vuelos internacionales. Sin embargo, Apcae opina que AESA debería pedir cuentas a Aena por su "pésima gestión" en la formación en inglés en vez de dirigirse directamente a los trabajadores.