Las Mutuas de Accidentes de Trabajo y los departamentos de Sanidad de las comunidades autónomas negocian la renovación de los convenios de colaboración que permiten agilizar los trámites de bajas y altas médicas, y que afectan a casi 16 millones de trabajadores.

Así lo reconoció ayer la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT) al explicar que desde julio están paralizados y a la espera de renovación los diferentes convenios individuales que suscriben las mutuas con las consejerías de Sanidad de cada gobierno autonómico.

Con excepción del Gobierno balear, el resto de ejecutivos autonómicos estudia desde hace dos meses la renovación de las firmas, por lo que los servicios sanitarios que reciben los trabajadores protegidos por estas mutuas se han ralentizado en algunos casos, según fuentes del sector.

No obstante, AMAT se muestra optimista y prevé que estos convenios se firmen "en un plazo corto de tiempo", a la vez que recordaron que las negociaciones de los acuerdos "llevan su tiempo".

Fuentes de la asociación dijeron que AMAT, que representa a 20 mutuas españolas de accidentes de trabajo que protegen a 15,5 millones de trabajadores, envió en julio dos propuestas de colaboración a las diferentes consejerías y que "esperan respuesta".

Recordaron que el objetivo de estos convenios es "agilizar" y controlar la gestión de la incapacidad temporal, ya sea por accidentes profesionales o por contingencias comunes, con el fin de evitar las listas de espera de la sanidad pública.

No obstante, estas mutuas se financian con un porcentaje de las cuotas que pagan los empresarios y los trabajadores a la Seguridad Social.

Los convenios de colaboración con las diferentes consejerías de sanidad pueden ser anuales o plurianuales.