El secretario de Formación Sindical de CCOO, Antonio Camacho, dijo hoy que la salida a la crisis económica no pasa por adoptar "salidas chinas", como rebajar los salarios y reducir los derechos fundamentales de los trabajadores, motivos por los que el sindicato reitera la llamada a participar en la huelga general el próximo 29 de septiembre.
Para ello, Camacho indicó en conferencia de prensa que el objetivo principal de CCOO durante este mes será acercar e informar del contenido real de la reforma laboral, que se aprobará el próximo 9 de septiembre en el Congreso de los Diputados, a los trabajadores españoles, al mundo de la cultura, y de la universidad, entre otros.
Añadió que se está intentando desde CCOO generar un conjunto de "solidaridades" para afrontar y buscar salida a la crisis económica, ya que "no puede ser que este sistema económico basado en el ladrillo, en la especulación económica y financiera sea el que ahora dictamine cómo tenemos que salir de la crisis".
De hecho, puntualizó, CCOO quiere denunciar, y así lo hará en la próxima huelga general, que una "reforma laboral no genera empleo", y menos si las medidas que se van a tomar permiten al empresario despedir a los trabajadores si se prevén pérdidas.
En opinión del sindicato, estas medidas incrementarán el número de parados y eso deprimirá más la economía, se resentirá el consumo y no se generará empleo, puesto que "es en base a un nuevo modelo económico, a la inversión productiva y a la recuperación económica como se va a generar empleo".
Es más, añadió Camacho, "no es con menos protección al desempleo, no es con menos negociación colectiva que va a venir, no es atacando a las pensiones, como España tiene que salir de esta crisis", y es por ello que desde CCOO se hace un llamamiento a los trabajadores para que se unan a la huelga general del 29 de septiembre, que "sin duda estamos convencidos de que será una huelga que va a paralizar el país".
El objetivo principal de la huelga, informó la secretaria de finanzas de CCOO, María Cardeñosa, será no sólo mostrar el descontento ciudadano hacia la reforma laboral y hacia el "recorte de los derechos fundamentales", sino intentar que el Gobierno y el Parlamento regulen y den marcha atrás a la reforma laboral, que recordó, no sería la primera vez que se hiciese, ya que se consiguió deshacer algunos puntos de la última reforma laboral aprobada en 2002.
Para que la huelga sea secundada y se consiga el objetivo previsto, afirmó el secretario general del CCOO en Canaria, Juan Jesús Arteaga, se intentará llevar la información sobre la reforma laboral a 3.000 centros de trabajadores, dando prioridad a aquellos en los que el sindicato tiene presencia y aquellos que cuentan con un mayor número de trabajadores.
Arteaga señaló, además, que antes de la huelga general en contra de la reforma laboral en España, que será además Europea, puesto que ese día está prevista una movilización sindical en Bruselas para denunciar la política neoliberal y la reforma laboral, se celebrará un acto o movilización sindical en Canarias, previsto para el próximo día 16 de septiembre, con el objetivo de vincular los temas canarios a las reivindicaciones nacionales.
También, apuntó, se llevará a cabo algún acto en Canarias el 9 de septiembre, que se unirá al acto central que tendrá lugar en Madrid, para protestar por la aprobación de la reforma laboral en el Congreso de los Diputados, puesto que "el día 9 de septiembre pasará a ser recordado como una fecha negra en el calendario para el mundo laboral".