Investigadoras del Instituto de Enfermedades Tropicales y Salud Pública de Canarias, que pertenece de la Universidad de La Laguna (ULL), han descubierto que hay mayor presencia de hongos que causan alergias cuando hay episodios de calima en Tenerife.

Cristina González y Nuria Teigell son las científicas que estudian los gérmenes aerotransportados que llegan a las Islas con la calima. "Llevamos un año recogiendo muestras que luego analizamos por biología molecular y hemos hallado gran diversidad de hongos alérgenos y bacterias", explicó Teigell.

Esta mayor presencia en el aire de hongos alérgenos cuando se producen episodios de calima explicaría las dificultades o problemas respiratorios que sufren las personas con alergia en las Islas.

La calima también trae más bacterias y hongos patógenos vegetales. Estos últimos afectan a los cultivos y "pueden causar daños en las plantaciones de la isla", explica Basilio Valladares, director del Instituto de Enfermedades Tropicales de Canarias.

Aunque este tipo de hongos no interesan a estos investigadores, cuya intención última es contribuir a la salud de las personas, ya han recibido propuestas para instalar una estación de vigilancia para tratar los cultivos, comenta Valladares.

Nuria y Cristina llevaron todos estos descubrimientos relacionados con los gérmenes aerotransportados de la calima al congreso de la Red Española de Ciencia y Tecnología (RECTA) de este año.

Para el próximo ejercicio se han propuesto terminar de clasificar estos hongos, avanzar en el análisis de las bacterias y comenzar con los virus.

Además, estas investigaciones podrían tener, a medio plazo, un uso clínico. "Nos hemos puesto en contacto con unos investigadores de Vitoria que estudian alérgenos y preparan vacunas hiposensibilizantes para un laboratorio farmacéutico", explica Valladares.

Se trataría de identificar estos hongos que provocan alergias que vienen en mayor número con los episodios de calima y cuáles de ellos afectan más a los canarios. De esta forma, se podrían realizar las vacunas específicas para los canarios que son alérgicos a uno u otro hongo.

Por otro lado, las dos investigadoras han pasado cinco semanas en el Florida Integrated Science Center, con el profesor Dale Griffin, una eminencia en investigación en aerobiología.

"Tratamos de determinar si las bacterias halladas en muestras de aire pueden transportar virus", explica Nuria. Estos virus, denominados "fagos", utilizan las bacterias como transporte para infectar a otros organismos, de forma que si un hombre entra en contacto con la bacteria también lo hace con el virus. "Las bacterias se convierten en un caballo de Troya", resume Valladares.

Para ello trabajaron con muestras de aire recogidas en el lugar donde se encontraban, con muestras proporcionadas por la NASA tomadas a 20 kilómetros de altura y con bacterias aisladas en episodios de calima asiática en Estados Unidos. "No había grandes diferencias entre los tres grupos, pero en todas encontramos fagos", dice Teigell.

La utilidad de esta colaboración continua con el profesor Dale Griffin es "aplicar el mismo protocolo de actuación a Tenerife y a las muestras de polvo recogidas en períodos de calima", según comenta Cristina González.

El estudio de la calima es cada vez más relevante, ya que ésta ya ha llegado a afectar a diversos lugares de la Península, donde nunca antes se habían dado este tipo fenómenos. Con el polvo de la calima viajan los gérmenes aerotransportados, de cuyo estudio se encargan estas dos investigadoras canarias.