"Siento una alegría inmensa por poder participar en el Festival de Candelaria", con esta afirmación explicó Beatriz Martín, una joven de San Miguel de Abona, las sensaciones e ilusiones que tiene por participar en la última edición de este prestigioso evento. Su canción "Vale la pena" se presenta como una novedad dentro de los registros habituales que acoge este certamen. El próximo 31 de julio, a partir de las 22:00 horas, podremos disfrutar de su interpretación en la plaza de la Basílica de Candelaria.

¿Cómo fueron sus inicios en la música?

Desde los diez añitos estoy cantando. Recuerdo mis inicios en un certamen en Granadilla de Abona con una canción que yo compuse. A partir de este momento me dediqué a dar conciertos por toda la isla. He recibido clases en el conservatorio de Santa Cruz, me he preparado para dedicarme a la música. Al final, me uní a mis tíos y formamos el conjunto Momento Beat. Ellos se encargan de los arreglos y yo hago la música y la letra de los temas.

¿Qué supone para usted haber sido seleccionada como finalista?

Siento una alegría inmensa por poder participar en el Festival. Para nosotros es una gran oportunidad. Por fin vamos a cantar en un escenario grande y eso es ya impresionante.

¿Qué tema va a defender?

"Vale la Pena". Es un tema que compuse sólo dos semanas antes de presentarnos al Festival de Candelaria. Creo que no tiene un estilo en concreto, sino que es una fusión. Escribir esta canción fue un algo muy especial. En ella hablo de que, a veces, vale la pena arriesgarse en la vida, guiarse por el corazón, no sólo llevarse por la lógica. Es un tema tan optimista que me hace sentir muy bien cuando lo canto.

¿Qué le anima a seguir trabajando en un mundo tan complicado como es el de la música?

La vibración que siento sobre el escenario hace que siga en esto, que siga cantando. Yo soy una persona muy tímida y cuando cojo mi guitarra y me subo al escenario soy yo misma, me transformo totalmente.

¿Comparte la opinión de que en los momentos de crisis se estimula la creatividad?

Sí que llega a afectar. Ves cómo está el mundo, como la gente que está a tu alrededor está sufriendo y eso hace que a la hora de componer intentemos aportar un granito de arena y poner un poco de optimismo en este panorama tan negro. Creo que ahora es el momento de transmitir con nuestra música que tenemos que tirar para adelante, que hay que luchar y ser más humanos.