La Comisión Europea recomienda a los Estados miembros que, ante el envejecimiento de su población, amplíen paulatinamente el periodo de vida laboral, basándose en unas proyecciones demográficas que plantean elevar en 2060 la edad de jubilación a los 70 años.

En un documento presentado ayer en Bruselas, la Comisión pide a los Veintisiete que contribuyan a garantizar la sostenibilidad de las pensiones ante la actual crisis y el envejecimiento demográfico.

El documento plantea que, para mantener el ratio de dependencia previsto para 2010 en la Unión (UE) -el número de personas en edad de trabajar en proporción al de aquellas que están por encima de la media de jubilación-, la edad de retiro debería incrementarse hasta los citados 70 años en 2060.

Esta hipótesis se basa en proyecciones demográficas elaboradas con datos de 2008 por Eurostat, la oficina comunitaria de estadística.

En los próximos años, la UE deberá elegir entre "tener pensionistas más pobres, aumentar las contribuciones al sistema o contar con más gente que trabaje durante más tiempo", destacó el comisario de Empleo y Asuntos Sociales, Laszlo Andor, al presentar el informe con el que se pretende "abrir el debate social".

Andor advirtió, no obstante, de que ante la presión financiera que sufren algunos Estados miembros con motivo de la crisis económica, éstos no deberían tomar medidas de urgencia como "presionar para aumentar la edad de jubilación", sino poner en marcha iniciativas "a largo plazo". Estos planes tendrían que basarse en las actuales tendencias de envejecimiento de la población y de presencia en el mercado laboral, sostuvo.

En particular, Andor se decantó por "aumentar la participación de la población de mayor edad en el mercado laboral", o lo que es lo mismo, aumentar la edad real de jubilación en lugar de la legal.

Durante los últimos 50 años, la esperanza de vida en la UE ha aumentado de media cinco años. De acuerdo con las más recientes proyecciones demográficas, de aquí a 2060 podría producirse un nuevo alza, de alrededor de siete.

Si a ello se suman las bajas tasas de fertilidad que se registran en los Veintisiete, el resultado es que la tasa de dependencia se duplicará: mientras que ahora hay cuatro personas en edad de trabajar por cada mayor de 65 años, en 2060 sólo habrá dos, según Bruselas.

Iniciativa española

En los últimos meses, varios Estados miembros han retrasado la edad de jubilación y otros planean hacerlo. Alemania, Países Bajos y Dinamarca la han situado en 67 años y Reino Unido en 68.

En España, el Gobierno ha propuesto también pasar de los 65 a los 67 años, lo que provocó, en contra de las tesis del Ejecutivo, manifestaciones de los sindicatos el pasado febrero. La patronal, por su parte, ha mostrado su claro respaldo a la medida, cuyo debate en el marco del Pacto de Toledo se acelerará a partir de septiembre.

En la actualidad, la edad real de jubilación en la UE se sitúa de media en 61,4 años. España está ligeramente por encima del promedio comunitario, con 62,6.

Laszlo Andor también mostró su rechazo a la "tentación de aplicar jubilaciones anticipadas" que pueden tener las empresas con dificultades económicas.

En la misma línea, la Confederación Europea de Sindicatos (CE) advirtió de que "no hay pruebas" de que un aumento de la edad de retiro garantice que los trabajadores permanecerán más tiempo en el mercado laboral.