Los servicios secretos del Reino Unido (MI5) investigan una posible red de veinte agentes rusos "ilegales" a raíz de la reciente detención en EEUU de diez espías.

El MI5, servicio de contraespionaje, indaga la red de contactos en Londres de una de las arrestadas, Anna Chapman, rusa de 28 años que estuvo casada con un británico y vivió en Reino Unido. Los servicios secretos temen que Chapman -calificada por el FBI como una persona bien entrenada para el engaño- haya reclutado a una red de agentes "durmientes".