La Fuerza Aérea turca ha bombardeado bases del ilegalizado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en el norte de Irak, según anunció hoy el Estado Mayor de Turquía en su página web.

En un comunicado, el Ejército precisó que los ataques tuvieron lugar el jueves por la noche sobre las montañas Kandil, donde el grupo kurdo dispone de bases desde las que organiza sus ataques en suelo turco.

El Estado Mayor destacó que todas las aeronaves regresaron a sus bases tras la ofensiva e insistió en que "sólo la organización terrorista separatista ha sido objetivo de la operación, que se desarrolló con la precaución necesaria para no dañar a civiles".

Ya antes del anunció oficial, la agencia pro kurda Firat había asegurado que en el ataque turco estaba también tomando parte fuego artillero,

Ni el Ejército turco, ni fuentes del PKK han dado cuenta hasta ahora de posibles bajas causadas por este bombardeo.

La última operación militar turca sobre suelo iraquí tuvo lugar el pasado 20 de mayo y dejó 50 bajas entre las filas del PKK, un grupo considerado terrorista por la Unión Europea y Estados Unidos.

La nueva incursión aérea se produce después de que el PKK matara ayer a cinco miembros de las fuerzas de seguridad turca en el ataque a un puesto militar en la provincia suroriental de Siirt.

En la operación de castigo del Ejército turco, que siguió a ese ataque, murieron 12 miembros del PKK.

Los medios turcos informaron hoy de que anoche resultaron muertos dos vecinos de la ciudad de Lice, al sureste del país, cuando respondieron con disparos al alto dato por una patrulla militar.

El PKK ha intensificado sus ataques en los últimos meses y en las últimas dos semanas ha acabado con la vida de 50 soldados turcos.

El PKK se levantó en armas contra el Estado turco en 1984 para reclamar la autonomía de los 12 millones de turcos que viven en Turquía. En los 26 años que dura ya esta guerra no declarada, unas 40.000 personas han muerto en los enfrentamientos entre los rebeldes kurdos y las fuerzas de Ankara.