La Comisión Ballenera Internacional (CBI) inicia hoy en la localidad marroquí de Agadir su sexagésimo segunda reunión anual, en la que se intentarán poner de acuerdo partidarios y detractores de reanudar la caza comercial de ballenas.

Los 88 países miembros de la CBI trabajarán hasta el próximo viernes por llegar a un consenso sobre la posible reanudación de la captura de esos cetáceos, que siguen siendo víctima de los arpones pese a la moratoria que entró en vigor en 1986.

En la agenda figura, además, el estudio de la situación de las poblaciones de esos mamíferos marinos, las infracciones cometidas en la temporada 2009, las implicaciones socioeconómicas de la caza a pequeña escala o la cooperación con otras organizaciones.

Otro de los puntos destacados será el papel de la CBI, un debate que el chileno Cristian Maquieira, elegido presidente en la reunión del año pasado en la isla portuguesa de Madeira, considera clave, dado que a su juicio antes de actuar sobre otras cuestiones se deben establecer las bases que definan los objetivos para los próximos años.

La CBI reconoce que existen diferencias fundamentales en torno a la investigación científica llevada a cabo bajo permisos especiales, la cacería bajo objeción y reserva, la moratoria a la cacería comercial y otros asuntos como el comercio internacional.

Por ello, la cita en Agadir supondrá una oportunidad para que los partidarios de la caza, como Noruega, Rusia, Dinamarca, Islandia y Japón, y los conservacionistas, liderados por Latinoamérica y Australia, acerquen sus posturas, así como para que se plantee la creación de una nueva reserva de ballenas en el Atlántico Sur.