LA HISTORIA de este establecimiento es la crónica del turismo en Puerto de la Cruz. Este alojamiento fue construido a finales de los años 60 gracias a la iniciativa de los hoteleros, pioneros en Tenerife, Juan García Roady y René Ballar y abrió sus puertas en 1970, en pleno momento de esplendor del Puerto de la Cruz como ciudad turística.

Su edificación fue toda una novedad, alojando en sus instalaciones la emblemática discoteca Atlantis, que en aquel entonces introdujo los últimos avances tecnológicos en iluminación, entre ellos el láser.

Otro hito importante para el Puerto de la Cruz fue la amistad personal del Sr. Ballar con el Sr. Thompson, propietario del histórico touroperador, lo que permitió un importante crecimiento del turismo británico en la ciudad turística.

De esta manera, el hotel Beatriz Atlantis, situado en primera línea costera, desempeñó un importante papel en el desarrollo turístico del Puerto de la Cruz y del Valle de La Orotava, logrando que muchos jóvenes que habrían tenido que emigrar a América se quedaran a trabajar en Tenerife, en los hoteles y en la industria que se desarrolló alrededor.

En los treinta y cinco años de historia que precedieron a la remodelación, el hotel alojó a más de 700.000 personas. Y el tiempo avanza, sobre todo en los edificios construidos en la década de los 60 con materiales de menor calidad que los actuales. Así, irremediablemente, el hotel Atlantis entró -como muchos de los establecimientos construidos en esos años- en decadencia. Y con el hotel también envejecieron sus promotores, haciéndose prácticamente imprescindible un cambio.

Fue entonces, en diciembre de 2006, cuando la familia Pérez -propietaria de los hoteles Beatriz con implantación en Canarias- toma el relevo apostando con fuerza por el Puerto de la Cruz, realizando una importante inversión de más de 35 millones de euros en un momento especialmente delicado para el sector turístico de este municipio.

Fue sin duda una apuesta muy valiente, realizada por los sucesores de Justino Pérez Sánchez, un hombre hecho a sí mismo, que nació en el seno de una familia humilde, que comenzó trabajando como transportista y productor de cereales hasta convertirse, gracias a un gran esfuerzo, en uno de los promotores turísticos más importantes de Canarias.

El hotel comenzó su reforma prácticamente desde cero, manteniendo, eso sí, su estructura. Especial mención merece el novedoso cambio de su fachada con la instalación de paneles de fibra de vidrio construidos en Tenerife, que logró cambiar la imagen anticuada de los años 60 por una línea contemporánea rematada en el piso 14 por una inmensa bóveda de hierro y cristal que alberga el nuevo spa & wellness.

En el proceso de reforma, las habitaciones se redujeron a 290, todas con magníficas vistas al mar y también al Teide. Un restaurante, dos bares, terraza chill out, business center, seis salas de conferencias y una de banquetes, miniclub, aparcamiento subterráneo y renovados jardines y piscinas completan el equipamiento del hotel.

Esta inversión atrevida -dada la actual situación de declive del Puerto de la Cruz-, pero a la vez ilusionante, tiene que servir de referencia para la transformación y recuperación de la ciudad y de otros espacios turísticos deteriorados.

Renovaciones como esta van a devolver al Puerto de la Cruz el liderazgo turístico internacional que en su día tuvo. Estamos ante un viaje de retorno que comienza dentro de unas semanas, cuando se firme por parte del Estado, Gobierno de Canarias, Cabildo y Ayuntamiento, el Consorcio para la Rehabilitación del Puerto de la Cruz.

Como homenaje a los Sres. García Roady y Ballar, a los casi mil empleados que con mucha profesionalidad atendieron a los más de 700.000 clientes, a la apuesta decidida, ilusionante y arriesgada de la familia Pérez -en línea con la política que tenemos que seguir en Canarias de recuperación de establecimientos- el Consejo Canario de Turismo concedió el premio a la excelencia turística 2010, el más importante que se concede en Canarias, al hotel Beatriz Atlantis.