El PP respaldó ayer desde todos sus ámbitos al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, con la excepción de la dirección provincial de Alicante, y rechazó que la causa judicial en su contra reabierta por el Supremo vaya a tener consecuencias políticas inmediatas.

Desde la dirección nacional, el vicesecretario de Comunicación, Esteban González Pons, dijo que el hecho de que le regalen tres trajes de la firma Milano, "una tienda normalita tirando a baja", a un presidente como Camps, "no es causa suficiente para empapelarlo". Además, descartó que el partido se esté planteando nombrar a otro candidato para la presidencia de la Generalitat valenciana, pues sólo maneja "un plan A", consistente en que Camps se mantenga en el cargo y que sea el cabeza de lista en las próximas autonómicas.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, recordó que el propio Camps dijo el miércoles que era inocente y que se iba a defender porque nadie se puede creer que un presidente de una comunidad autónoma se venda por tres trajes.

Por el momento, según el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, "no hay ningún tipo de reproche definitivo" de la Justicia hacia el presidente valenciano, que a juicio del eurodiputado del PP y ex ministro del Interior Jaime Mayor Oreja es uno de los políticos en España que "desde luego no se ha enriquecido".