El ministro de Fomento y vicesecretario general del PSOE, José Blanco, ha confiado hoy en que los sindicatos estén "a la altura de las exigencias del país" y del "esfuerzo nacional" necesario para superar la crisis y que valoren "desde la responsabilidad" el plan de ajuste diseñado por el Gobierno.

Blanco ha respondido en estos términos en declaraciones a los medios al ser preguntado por la reacción de CCOO y UGT al plan de ajuste anunciado hoy en la Congreso por el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, que incluye la bajada del sueldo de los funcionarios y la congelación de las pensiones.

El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha dicho que el plan es "injusto" y "antieconómico", por lo que merece la "máxima sanción social" y una contestación "masiva" en las calles, mientras que el líder de UGT, Cándido Méndez, ha avanzado que "con toda probabilidad" habrá movilizaciones en las próximas semanas.

Sin embargo, Blanco ha mostrado su esperanza en que, dado el actual contexto económico, "todo el mundo asuma su responsabilidad" y "su compromiso de país, más que nunca en este momento", y ha deseado que tanto las fuerzas políticas como los sindicatos "estén a la altura de las exigencias".

Blanco ha admitido que las medidas son "difíciles y duras", pero ha insistido en que son necesarias para garantizar el crecimiento económico, anticipar la recuperación y reducir el déficit.

Unas medidas que espera que se valoren "desde la responsabilidad", para que se puedan "discutir y finalmente hacer efectivas".

"Quienes tienen trabajo estable tienen que ser solidarios con quienes no lo tienen", ha dicho el ministro, en cuya opinión esto conllevará que todos tengan que apretarse "un poquito el cinturón" para ayudar a los que lo están pasando peor por la crisis.

A su entender, eso permitirá que todos tengan una oportunidad y que no la tengan sólo "quien tiene un empleo estable".