El paro sigue siendo el mayor problema de los españoles, aunque esta preocupación se ha reducido 3,2 puntos en un mes, según el último barómetro del CIS.

La encuesta apunta un incremento de 3,6 puntos de la inquietud de los españoles por su clase política, que sigue siendo el tercer problema de la ciudadanía.

Según el estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) realizado entre el 6 y el 14 de abril, el desempleo es citado como el principal problema de España por el 79,7 por ciento de los encuestados, frente al 82,9 por ciento que lo hacía en marzo.

Crece, sin embargo, el desasosiego por la situación económica en general, que pasa del 45,3 por ciento en marzo al 46,8 por ciento en abril.

No obstante, el mayor incremento lo registra la clase política y los partidos, que ahora preocupan a un 19,4 por ciento de los ciudadanos, frente al 15,8 por ciento del barómetro anterior.

La inmigración sigue ocupando el cuarto puesto del ránking, con el 13,3 por ciento, prácticamente sin variación, seguida del terrorismo, que sube ligeramente del 11,1 al 12,3.

Preguntados por los problemas que más les afectan personalmente, el paro continúa encabezando la lista, al ser aludido por el 42,5 por ciento, para continuar con los de índole económica, que menciona el 38,3; la vivienda, con el 6,7, y las pensiones, con el 6,5 por ciento.

Mejora también la percepción que los españoles tienen de la situación económica, que si en marzo era vista como "mala" o "muy mala" por el 78 por ciento de los encuestados, en abril le mereció esa calificación al 74,4 por ciento.

A la par, han pasado del 2,1 al 2,8 por ciento quienes la consideran "buena" o "muy buena.

También han subido quienes ven el panorama futuro de una manera un poco más optimista, habida cuenta de que el 22 por ciento confía en que vaya a mejor (el 21,1 por ciento en marzo) y el 26,9 por ciento se teme que empeore (29,2 por ciento un mes antes).

En cambio, se agrava la opinión de los ciudadanos sobre la situación política general.

La tildan de "mala" o "muy mala" el 63,4 por ciento, 2,1 puntos más que el mes precedente, y únicamente para el 4,4 es "buena" o "muy buena", lo que supone un descenso de seis décimas.

Los españoles no se fían de que la coyuntura sea distinta dentro de un año, porque el 23,8 por ciento de ellos estima que irá a peor (2,6 puntos más que en marzo), en tanto que el 11,8 por ciento dice que irá a mejor (11,0 por ciento hace un mes), y el 48,3 por ciento cree que seguirá igual.