El Rey había sido sometido hasta ahora a intervenciones quirúrgicas que pueden considerarse "menores", como la eliminación de unas varices en 2001, y otras por accidentes de esquí, como la extirpación de una fibrosis en 1985, que se le formó por una fisura de pelvis que sufrió en una caída en una pista suiza.

El 1 de marzo de 2001, fue sometido a una intervención leve para eliminar unas varices en la pierna derecha en la Clínica Sant Josep de Barcelona, en la que ingresó la noche anterior para una revisión médica rutinaria.

También ha sido operado a causa de accidentes deportivos, como la caída del 3 de enero de 1983 en la pista de esquí de la estación suiza de Gstaad. Sufrió una fisura de pelvis, estuvo en la cama un mes y usó bastones y un corsé pélvico durante el período de recuperación.

A causa de la fisura, el 19 de julio de 1985 tuvo que ser intervenido en una clínica de Barcelona para extirparle una fibrosis que se le había formado.

En diciembre de 1991, sufrió un accidente en la rodilla derecha que le afectó al platillo tibial externo, cuando esquiaba en Baqueira Beret, al ser derribado por otro esquiador.

A causa de la lesión, tuvo que ser operado para reducirle "la fractura por hundimiento de meseta tibial externa con resultado plenamente satisfactorio" en el Hospital "Puerta de Hierro" de Madrid, y tuvo que usar muletas hasta abril de 1992.

En febrero de 1995, sufrió una fisura cerca de la muñeca derecha tras resbalar en una placa de hielo cuando volvía de esquiar de Candanchú. Estuvo escayolado unos días y vendado posteriormente.

El Rey acudió con el brazo vendado a la boda de su hija la Infanta Elena, el 18 de marzo de 1995 en Sevilla.

El 21 de junio de 1981 se golpeó contra una puerta de cristal tras jugar un partido de "squash" con el tenista Manolo Santana.