El jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, consideró ayer que Rusia es "un gran aliado, imprescindible para la UE", y apostó por "estrechar los lazos" con este país porque, a su juicio, de ellos dependen en buena medida la seguridad y la estabilidad de la Unión.

Zapatero pronunció estas palabras acompañado del presidente ruso, Dmitri Medvédev, antes de comenzar un encuentro bilateral en Washington, donde ambos participan en la Cumbre sobre Seguridad Nuclear, organizada por el presidente estadounidense, Barack Obama.

En la reunión, los dos acordaron suscribir una declaración antes de que concluya el semestre de la presidencia española de la UE para articular un diálogo sobre seguridad entre el bloque europeo y Rusia.

El presidente del Ejecutivo español se comprometió además a viajar a Rusia en junio para impulsar las relaciones bilaterales que, dijo, atraviesan un momento "muy favorable".

Mientras, Medvédev mostró la disposición de Gazprom y del resto de petroleras rusas a iniciar proyectos conjuntos con empresas españolas y subrayó además el interés ruso en incorporar tecnología española de ferrocarriles, como el Talgo.

Antes de que concluya este semestre España acogerá un seminario empresarial abierto a rusos y europeos y 2011 será denominado el año de Rusia en España y de España en Rusia.

Medvédev resaltó la importancia de que España presida por turno la UE y apostó por "sincronizar" los relojes para analizar el estado de las relaciones de Rusia y la Unión. Al margen de estas cuestiones, el presidente ruso agradeció a España sus esfuerzos para que la UE facilite la concesión de visados a los ciudadanos rusos, un asunto de crucial interés para Moscú que encuentra reticencias en algunos de los países miembros.