La familia del médico zaragozano secuestrado en el Congo, Mario Sarsa Manresa, espera noticias del Ministerio de Asuntos Exteriores sobre su liberación "con calma", lo más "aconsejable", dadas las circunstancias, ya que no se sabe cuánto va a durar.

Así lo ha indicado en declaraciones a los medios de comunicación su hermana, Yolanda Sarsa, quien ha reconocido que hay momentos del día en que estás "más animada" y otros "más desanimada", pero "nos corresponde esperar, hacer uso de la paciencia e intentar mantener la calma", ya que "no se sabe cuánto tiempo va a durar la espera".

Ha comentado que hoy el embajador español en la República Democrática del Congo, Félix Costales, viajaba a la zona para mantener "las oportunas reuniones" con varias personalidades, como el jefe del Estado Mayor de la Defensa o el gobernador de la provincia, entre otros.

"Cuando termine de hacer su trabajo, que es lo que está haciendo ahora, supongo que se pondrá en contacto conmigo", ha añadido Yolanda, al tiempo que ha confiado en que su hermano esté bien.

"Es lo que queremos y es lo que hay que hacer para hacer más llevadera y soportable la espera", ha agregado.

El médico se encontraba de vacaciones en la zona cuando fue secuestrado y, según ha dicho su hermana, conocía perfectamente cuál era la situación allí, ya que "él no es un ignorante, sino todo lo contrario", pero "cuando alguien emprende un viaje nunca piensa que le va a pasar nada malo", sino "no lo hace".

A su juicio, ha sido un golpe de mala suerte y un encuentro fortuito con sus secuestradores, y ha recordado que el grupo que lo retiene "no ha hecho ninguna petición", es decir que no lo retienen por motivos políticos o económicos, sino por "razones que desconocemos".

Ha descrito al médico como "una persona segura, con recursos", y ha recordado que conoce muchos países de África porque estuvo muchos años viviendo en Guinea Ecuatorial.

La manera habitual de comunicación entre los hermanos era el correo electrónico y el último que recibieron del médico ya les avisaba de que estaría unas dos semanas sin enviar noticias, dado que iba a hacer un recorrido por el río Congo, pero al transcurrir más días de los esperados sin saber nada de él decidieron ponerse en contacto con el cónsul.

Fue así como confirmaron que la persona que se encontraba retenida por los rebeldes de la etnia enyele, en el noroeste de la República Democrática del Congo (RDC), era su hermano, ya que al principio hubo un problema de identificación, dado que su apellido "no es fácil de pronunciar y se presta a confusiones", ha agregado Yolanda Sarsa.

Mario, especialista en medicina tropical, es soltero, aunque tuvo una pareja cuando estuvo viviendo en Guinea Ecuatorial, pero rompieron hace muchos años, y tiene dos hijos de 27 y 29 años que viven en Madrid.